El pequeño Marlon Aguilar resultó el matancero más destacado en el Campeonato Mundial de Ajedrez Escolar, desarrollado del 11 al 19 del mes en curso en Ciudad de Panamá, con la asistencia de más de 700 jugadores de 60 países.
Con poco más de nueve años, este émulo del genial José Raúl Capablanca, trazó un magnífica estrategia con su entrenador, y gracias a ello pudo salvar no pocos obstáculos en medio de los tableros frente a rivales de diferentes rincones del planeta, incluidos europeos y asiáticos, cabezas del juego ciencia en la actualidad.
Marlon finalizó sexto, con 6,5 puntos de nueve posibles, lo que es considerada una estupenda actuación por Carlos Rivero, comisionado Nacional de la disciplina, y por el Maestro Internacional Rodney Pérez, entrenador del equipo nacional.
A decir de otros especialistas se está en presencia de un niño enteramente dedicado al juego de los escaques y que su talento actual lo puede conducir, en el mañana, a situarse en un lugar preponderante en el país y allende sus fronteras. Solo depende de su entrega y estudio del ajedrez moderno, que llevará paralelo con la docencia en el aula y en casa.
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Ana Paula Vázquez se ubicó el en noveno puesto en la categoría sub-11 para damas con 5,5 unidades acumuladas, mientras que su paisana Ashly Armengol ancló en el lugar 14, en idéntico nivel, con media rayita menos que su compañera.
La delegación cubana integrada por nueve trebejistas conquistó una medalla de plata por intermedio de del capitalino Alain Otero, de la categoría sub-17 masculina.
En cuanto al Campeonato Nacional Juvenil, que se desarrolla en estos momentos en la ciudad de Villa Clara, a los matanceros Lianet y Lorenzo Pérez no les va bien, marchan en los últimos puestos en la tabla de posiciones.
