División Territorial de Etecsa en Matanzas. Foto: tomada del perfil de Facebook de la empresa
El natural proceso de envejecimiento poblacional en Cuba resulta prioridad del Estado. Cada día crece el número de ancianos, muchos de ellos con alguna discapacidad para asumir los riesgos de los años; de ahí la importancia del trabajo social comunitario.
Berta Sánchez, persona encargada del cuidado de Miriam Luisa Iglesias, utilizó la pequeña cuartilla de una agenda de notas para contar, en magistral síntesis, el problema que duele a la señora Miriam Luisa, con impedimentos físicos, residente en la calle San Carlos, No. 7708, entre Contreras y Manzano, en esta ciudad.
“Desde el pasado 15 de octubre —refiere la cuidadora en su misiva—, por mal trabajo de la Etecsa, se le retiró el servicio telefónico fijo. Tienen conocimiento del caso el director comercial y Orismay, jefe del Centro Telefónico de Matanzas, quien atendió la queja. También se informó el problema al Departamento de Atención a la Población del Comité Provincial del Partido. Dicen que no hay combustible para llevar el carro. El tiempo transcurre y no hay respuesta ni solución”.
Reconoce Gustavo Ricardo Montesino Reyes, director territorial de la Etecsa, que, “efectivamente, por un error cometido en la realización de un cambio de tecnología que involucra alrededor de 700 servicios, al reconectarlo, el número 45286362 quedó afectado.
“Para solucionar el problema, se requería la coordinación entre áreas diversas encargadas de restaurar dichos servicios telefónicos en nuestros sistemas, y obrar de manera excepcional, no por los procedimientos habituales. Es por ello que se produjo la demora.
“Ya restablecimos el servicio y ofrecemos disculpas por las molestias ocasionadas”.
¿REGRESAR A LA LEY DEL MÁS FUERTE?
La decepcionante historia la cuenta Félix Valdés, profesor jubilado del barrio yumurino de Pueblo Nuevo.
“El pasado 6 de enero, la delegada del Gobierno que atiende el local donde se distribuye gas licuado, aledaño al parque Maceo, dijo a los clientes concentrados allí que no continuaría dando turnos ni organizando la cola, porque no soporta más tensiones. Por ende, ahora sería por orden de llegada.
“Interpreto estas declaraciones como el regreso a la barbarie, al sálvese quien pueda, a la ley del más fuerte. En este lugar los coleros impusieron sus leyes y cobraron precios altísimos por la venta de turnos. Fui uno de los que plantó cara a esos vividores y en más de una ocasión me quejé al Gobierno y a Cupet, pero la solución tardó en llegar. Felizmente, asumió la delegada, y con ella el orden. Ahora comunicó que no continúa.
“¿Qué hará el Gobierno municipal? ¿Contemplarnos como los nuevos gladiadores del Circo Romano? ¿Esperarán el inicio de broncas para tomar medidas?
“Por otro lado, la dirección de Cupet adoptó la impopular decisión de trasladar la oficina de trámites de La Playa hacia la Zona Industrial porque, al fallar la corriente, allí la conexión no es buena. ¿Saben cuánto cuesta trasladarnos para hacer el recontrato? ¡Casi mil pesos! Y los jubilados no podemos darnos ese lujo. Nunca respondieron mi queja. Hay que hallar solución a estos problemas.
Profesor Félix, desde ya solicitamos el pronunciamiento de funcionarios del Gobierno local y directivos de Cupet. El espacio está disponible.
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