Continuamos con el ciclo dedicado a Varadero, y esta vez nos referiremos a la historia del Hotel Club Kawama, instalación de su tipo más antigua que se conserva en el balneario y presta servicios aún.
Todo comenzó en 1930, cuando el coronel Eugenio Silva Alfonso construyó siete cabañas de madera con el objetivo de sumarse al desarrollo de la infraestructura turística que caracterizó a Varadero en las primeras décadas del siglo XX. De las mismas solo se conserva una en la actualidad.
Posteriormente, Silva erigió una casa señorial de ambiente colonial español para el disfrute de su familia, mezcla de corredor norteño y cortijo andaluz. A este edificio de 16 habitaciones se le conoce como “El Cortijo” y su construcción termina en 1931.
En 1940, el dueño contrae segundas nupcias con una norteamericana de origen judío convertida al catolicismo, quien colocó un cartel a la entrada del hotel que decía: “No se admiten perros, negros ni judíos”.
Cuentan que por aquellos años visitó la instalación un multimillonario norteamericano de apellido Liebow, a quien se le negó la estancia en Kawama por su origen judío. Indignado, el magnate le aseguró a Silva que construiría muy cerca de allí un hotel que le robaría toda la clientela. Estamos hablando, amigos, del Hotel Internacional, que vería la luz en 1950.
Posteriormente, Kawama se amplió con la construcción de un conjunto de viviendas de estilo moderno, diseñadas por los arquitectos Miguel Ángel Moench y Nicolás Quintana. Por esta época, numerosas personalidades de la vida civil y militar cubana edifican en sus inmediaciones lujosas residencias, que después de 1959 pasan a formar parte del Hotel Club Kawama.
En febrero de 1960 sus últimos dueños deciden emigrar, alegando razones de enfermedad, y así el hotel Kawama quedó protegido solo por sus trabajadores, quienes trabajaron diariamente sin recibir salario alguno.
En junio de ese mismo año, Kawama recibe la visita del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, acompañado del novelista y filósofo francés Jean Paul Sartre. El 7 de octubre de 1960 la instalación pasó a ser propiedad del gobierno revolucionario.
Actualmente, el Hotel Club Kawama se destaca por contar con más de 2500 clientes repitentes que lo visitan desde el año 1972 y se agrupan en el Club de Amigos Fieles, que cuenta con aproximadamente 500 miembros activos.
Felicidades al periodista por tan excelente reportaje sobre la historia de este icono hotel , gracias a la redacción del periódico Girón por publicar la historia de la playa de varadero una de las mejores del mundo ,gracias al periodista deseándole nuevos éxitos en su columna de Girón