Un danzón que se te clava a dos dedos por debajo del bolsillo, donde en la levita va el pañuelo. Un danzón como una piedra en el zapato punticuadrado que no permite que estés como así, sin hacer nada. Un danzón como si cuando la Isla emergió del Golfo hubiera emergido tarareándolo, primigenio casi tectónico. Un danzón con luces estereotípicas en un viejo cabaret que nos recuerda que en un «uno, dos y tres» no se nos va la vida, sino que dan deseos de echarse otro pasillo.
Por dicha cuestión, porque necesitamos uno de esos, o un mambo, o un son, o solo una melodía en clave cubana que tú tararees, este 27 de marzo quedó inaugurado el 6to Encuentro Danzonero Miguel Failde in Memoriam en el Continental, cabaret perteneciente a Palmares Matanzas.
Bajo un cielo estrellado, si las estrellas fueran un juego de luces, para resaltar el glamour, que se reflejan en un techo, esta tarde noche se le ofreció un espectáculo a los presentes repleto de música y vieja nocturnidad. La gala contó con la presencia del Ministro de Cultura, Alpidio Alonso y otros directivos del ramo en la provincia; así como bailadores y cultores del danzón de toda Cuba y de México.
La Orquesta Failde compartió parte de su repertorio que, al final, no va más allá que canciones del repertorio nacional, no sé sí decir renovadas o sencillamente traídas a este siglo en que nos cuesta más tomarnos las cosas con calma: Las Alturas del Simpson de Miguel Failde, Mambo #8 del matancero Dámaso Pérez Prado…
Haila María Mompié interpretó ese hermoso danzón cantado que es «Hoy mi Habana» y alguien recordó el sabor salado de una piel y de un mar. Verónica Lynn en su personaje de la dama con el velo de «Réquiem por Yarini» invita a Ethiel Failde a cantar su mejor tema y comienza «Danzón para la espera», el que comparte con Silvio Rodríguez. En el público un señor mayor baila con una muchacha que lo tiene con la lengua afuera, pero él ahí, firme para que nadie dude de la firmeza de sus piernas.
Entregaron la condición La Tórtola, máxima distinción que da la Dirección Provincial del Cultura a la pareja de bailarines, Teresita y Hugo, referentes de quienes, como ellos, dijeron al recibir el reconocimiento que «nunca muera el danzón», porque si sucede así tal vez nosotros, muramos un poco.
Se le rindió homenaje a la Sonora Matancera con acompañamiento de la compañía artístiva Veldarte. A la vez se habló acerca de la influencia del Danzón en México, para ello Haila cantó junto a la Orquesta Failde «La llorona».
Se celebró el aniversario 85 de José Leonard Vicedo, el Inquieto Joseíto, una de las personas a las que se le dedica este 6to Encuentro, quien como los viejos juglares, como los sin tierra porque toda la tierra es suya para bailarla, creó clubes de Danzón por toda Cuba. «Me están haciendo vivir», exclamó. Luego el Ministro le otorgó la Distinción por la Cultura Nacional.
Sin embargo, tal vez el mayor homenaje sea el rescate por parte de la Orquesta Failde del tema El inquieto Joseíto, que le dedicara otra agrupación años después y se había extravíado con el tiempo.
Como un reconocimiento a su obra ensayística y sus estudios sobre musicología cubana y por su amor incondicional, ese que solo conocen ciertos padres, se le otorgó el Premio Honorífico Miguel Failde 2025 a la master Alicia Valdés Cantero, quien en su discurso reconoció que ella, que ha organizado tantos eventos, cuando comenzaron los aplausos nunca pensó que fueran para ella, porque en los eventos que ella armaba no eran para ella.
Cuba tiene un bandera, un himno que se escribió sobre el vaivén del caballo de la historia y una manera muy de nosotros de entender el amor tropical. Sin embargo, nos faltaba una manera nuestra de expresarnos con el cuerpo: ahí Failde nos regaló el Danzón. A ese obsequio se dedicó esta bella tarde noche, como se hará los próximos tres días, tres días donde donde habrá un danzón para la espera, un danzón para los amantes, un danzón para ti y para mi.
