Cuatro vidas sobre un escenario

Cuatro vidas sobre un escenario

Hace cinco años, cuando se estrenó “Cuatro”, la obra que este fin de semana llegará a la Sala Adolfo Llauradó de la capital como parte de la Jornada Homenaje a Haydée Santamaría, nadie imaginaba un país tan diferente al de entonces.

Quizás ese lapso de tiempo transcurrido, las vivencias que ha aportado al equipo de actores y a la dirección de la escena, constituyan algunos de los valores añadidos de esta reposición, a la que se suma un compromiso raigal explícito con la cubanía.

La puesta, a cuyo ensayo asistió el público matancero este miércoles, pone sobre el escenario los conflictos y la vida –tal vez menos difundida– de cuatro cubanos excepcionales: Ernesto Lecuona, Rita Montaner, José Jacinto Milanés y Haydée Santamaría.

Cuatro incomprendidos desatan sus fantasmas y sus pesadas cargas emocionales en el escenario, para un público que no pudo más que aplaudir y emocionarse junto a las actuaciones excepcionales de Iván García, María Laura Germán, Yadiel Durán Bencosme y una Leynis Cabrera inmensa en su interpretación de Haydée.

“Si algún lujo tiene el espectáculo no es ni mi sentido aglutinador, ni el diseño precioso de Zenén Calero inspirado en la bandera, ni el valor de la música absolutamente cubana que utiliza la obra. El lujo son ellos cuatro, un elenco al que se incorpora hoy Leynis Cabrera.

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“La tarea que le dimos es gigante, porque encarnar a Haydée es muy duro. Sin embargo, lo ha asumido con toda la valentía que la caracteriza y ha logrado un resultado maravilloso. Creo que los cuatro han asumido esta reposición de manera profesional, humana y siempre desde la defensa de nuestros valores más autóctonos”, explicó Rubén Darío Salazar, director artístico del espectáculo.

Para Leynis, quien disfrutó “Cuatro” como espectadora en 2017, asumir la responsabilidad de encarnar a la heroína cubana en una obra que habla de sus zonas menos difundidas, de sus frustraciones y de sus tristezas, representó un reto enorme, según comentó.

“Lo vi varias veces, me gustaba mucho y, por supuesto, cuando me hicieron la propuesta me alegré muchísimo, aunque al mismo tiempo me generó un poco de tensión también por lo que representaba. Se trata de un personaje concebido para una bailarina, un trabajo que desde su estreno me llamó la atención por lo que logró hacer en su momento Anisleydis Estévez, con su interpretación desde la danza del monólogo de Haydée. Hoy me complace muchísimo haber asumido este reto, porque todo el equipo, que ya conocía el espectáculo me apoyó para acomodar el personaje a mi registro como actriz”, aseguró Leynis.

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Pero no deja de hablar con modestia. Omite lo que nos confirman sus compañeros de escena sobre la constancia y el trabajo impresionante que ha logrado o la fuerza que le añade a la obra, en la que brilla a la par de dos grandes actores como María Laura e Iván, cuyas interpretaciones siempre resultan magistrales.

“Yo creo que su trabajo ha sido espectacular, es algo que se ve y que apreciamos el resto de los actores de ‘Cuatro’. Ha sido un hallazgo extraordinario que se uniera al elenco. Es algo que definitivamente se nota y que el público va a saber apreciar de igual modo”, destacó Yadiel Durán, coreógrafo y actor del espectáculo.

“Siento que la temática que trata en sentido general también ha intentado ser consecuente con nuestro contexto actual, con ese sentido de lo que es entender, asumir y llevar la Patria, con todo lo que representa emigrar, sentir que formas parte o no de algo tan importante como un país, complejas problemáticas sociales que no imaginamos vivir de forma tan abrupta hace cinco años y que ahora se integran junto a la defensa de lo cubano, de la vida y la obra de estas cuatro figuras”, añadió Yadiel.

Lo ha dicho también Rubén Darío Salazar Taquechel con esa música que encierran siempre sus palabras: “Si en el 2017 el estreno de la obra supuso un estremecimiento del concepto sobre estas cuatro figuras que escogimos, pues ahora más, porque nos parecía que si algo debe hacer un país es cuidar, resguardar, rescatar, promocionar sus vidas”.

Para el director de Teatro de las Estaciones, acoger el proyecto de teatro coreográfico “Cuatro” de Yadiel Durán Bencosme, merecedor de la beca Santa Camila de La Habana Vieja, supuso mover al colectivo titiritero por excelencia de su zona de confort.

“Con ‘Cuatro’ nos lanzamos a experimentar, pero más allá del reto que implicó y que implica hoy, nos motivó simplemente el compromiso que se tiene con la cultura cubana y con las personalidades que a nivel social han sido menos atendidas, silenciadas, incomprendidas o no asimiladas en toda su magnitud”, agregó.

Cuatro vidas sobre un escenario

“Cuatro” regresa, y lo hace con toda la conciencia que merece el asunto: defender Cuba, salvaguardar su historia, entender “algo tan grande, tan extenso, tan sugerente, tan metafórico y tan complejo como es la cubanía”.

“Yo creo que si se quiere defender la Revolución, si se quiere defender la cultura, hay que ser coherente con lo nuestro. Nosotros con lo nuestro, con nuestros muertos. Lo que proponemos con esta reposición no es más que eso y que el público pueda apreciar una obra que, además, estremece desde el amor, que cuestiona desde la pasión profunda por Cuba”, concluyó Rubén.

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Sobre el autor: Lisandra Pérez Coto

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