Con la presencia de Susely Morfa González, Primera Secretaria del Partido en Matanzas, y Mario Sabines Lorenzo, Gobernador de la provincia, fue abanderado este miércoles el contingente de trabajadores eléctricos matanceros que partirá a Mantua, Pinar del Río, a apoyar las labores de recuperación tras el paso de la Tormenta Tropical Idalia.
«Allí la tarea que nos espera será bien dura, pero como dijera el Comandante en Jefe Fidel Castro, no ganan batallas aquellos que creen que el combate es fácil. Ganan batallas aquellos que saben que el combate es difícil. Por eso venceremos», aseguró Yoan Arencibia Acosta, quien leyó el compromiso de los eléctricos matanceros.
De manos de Susely Morfa y la vicegobernadora Marieta Poey, Jorge Alejandro Rodríguez Azpeita recibió la bandera en representación del Contigente, y Yoan Arencibia Acosta y José Carlos Arencibia Pereira, la lona de matanceros en victoria.
Versos de los repentistas Orismay Hernández y Ricardo González amenizaron la despedida a los linieros matanceros.«Hoy saldrán al Occidente donde la tarea es dura / para enfrentarse a la altura del peligro y la corriente. / Vayan como un Contingente: sembrando esperanza y vida, / vayan con la frente erguida borrando toda amenaza / hasta que la última casa tenga la luz encendida. /Vayan a Pinar del Río a realizar su trabajo y llévenle a Vuelta Abajo abrazos del pueblo mío».
«Nosotros estamos dispuestos como siempre. Es complicado, pero estamos preparados para todo tipo de situación. Trataremos de darle servicio a la población lo más rápido posible», refirió Ariel Espinosa, liniero perteneciente a la Obe Varadero.
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«Es una tropa muy experimentada que se le reinserta siempre fuerza nueva, para que le llegue el oxígeno a los lugares donde vamos», enfatiza Alain Hernández López, especialista en Seguridad y Salud del Trabajo de la OBE Unión de Reyes. «Estamos acostumbrados a este tipo de tareas. Estamos preparados desde el primer momento con todo el equipaje listo, con la logística, la técnica y la transportación. Desde ayer tenemos una tropa allá, realizando los primeros trabajos de celaje de línea, de planificaciones de trabajo, para no perder tiempo. Somos un equipo muy compacto, más del 80% nos conocemos, de compartir los otros trabajos anteriores, otros ciclones. Tenemos una parte técnica, pero también un aseguramiento de soporte como es la transportación, mecánicos, cocinero, especialista en seguridad y almacenes. O sea, es un equipo completo, en lo que unos trabajan en la línea, otros garantizan la logística, materiales, para que sea ininterrumpido el trabajo».
Lázaro Javier Valles Gallardo, joven liniero de la Obe Colón, también apoyó el pasado año en la recuperación de Pinar del Río. «Desde que lleguemos ahí es trabajando. Es parar postes, reparar líneas, tirar conductores nuevos, es bastante trabajo».
En el caso de Liván Morales, Jefe de Brigada de Unión de Reyes, ya atesora siete experiencias anteiores. «Vamos para allá a resolver el problema que creó Idalia y estar el tiempo que sea necesario. Regularmente el trabajo consiste en levantar postes que se caen por las características de terreno. Al no haber mucha piedra, los postes no quedan con la fortaleza que quedan en esta zona, y eso cualquier viento lo tumba. Entonces, fundamentalmente postes y líneas de transmisión acaparan los mayores daños».
Nodey Benítez García, Jefe Operaciones de la OBE Unión de Reyes, que asiste por primera vez a este tipo de tareas asegura que dará lo mejor de sí. «La idea es lo más rápido posible darle la recuperación a los pinareños».
«Estaremos hasta que se acabe, hasta que el último rincón tenga corriente, esa siempre ha sido nuestra meta», enfatizó Alain Hernández.
Brigadas de líneas, carros de servicio y personal de apoyo conforman el contingente de matanceros que apoyarán las labores de recuperación en Pinar del Río, donde más del 60 % de la provincia permanece sin fluido eléctrico.
La solidaridad y el humanismo siempre presentes en todas las tareas. Vamos muchachos
ayudemos a Pinar del Río como estamos acostumbrados que realmente no les escampa.
Hay una lectura extra. ¿Estamos realmente tomando acciones preventivas para controlar o minimizar el impacto de la afectación de estos eventos al sistema eléctrico? Hay suficiente percepción del riesgo, se identifican correctamente causas y condiciones que propician la avería, se conocen en detalle las consecuencias. Como se relata, un liniero expone que gran parte del trabajo consiste en «…levantar postes que se caen por las características de terreno. Al no haber mucha piedra, los postes no quedan con la fortaleza …, y eso cualquier viento lo tumba. Entonces, fundamentalmente postes y líneas de transmisión acaparan los mayores daños». Y, al caerse el poste, tumba y enreda las líneas de trasmisión, se rompen los aisladores, caen y se averían los transformadores, etc. Porque, sobre todo y ante todo, cualquier análisis debe incluir el gran gasto de recursos que significa la recuperación, frente al gasto (mucho menor) de ejecutar la instalación, su mantenimiento, reparación o reposición con la calidad requerida y en esa cuerda, incluyendo acciones que controlen o minimicen el impacto de los eventos meteorológicos, asegurar mejor la estructura base de la línea aérea, para que no se caiga, y no tengamos o sea mínima la afectación.