El Estadio Cerro Pelado, del municipio Jovellanos, recibió las actividades centrales por el Día de la Cultura Física y el Deporte en Matanzas, una jornada que tuvo repercusión en todos los territorios de la provincia.
“Estuvieron convocados los 356 trabajadores de la Dirección Municipal de Deportes para vivir este día, así como alumnos, profesores de educación física y escuelas. El alcance de nuestros proyectos y áreas para el esparcimiento se extiende hasta todos los consejos populares”, comentó a la prensa Lázaro Martín Delgado Piedra, director municipal del INDER en el central territorio.
Exhibiciones deportivas y modelajes de las disciplinas presentes en el municipio conformaron el Festival Recreativo con el cual los trabajadores del sector festejaron la jornada. A la celebración, que cada 19 de noviembre llena plazas, parques y estadios de todo el país, también acudieron embarazadas, niños de los círculos infantiles y ancianos, muestra del amplio universo de practicantes.
“La provincia confía en nosotros para procesos vitales como captación y promoción hacia centros nacionales y la propia Escuela de Iniciación Deportiva Luis Augusto Turcios Lima. Los Juegos Olímpicos de París 2024 fueron ejemplo de ello, cuando cuatro deportistas de Jovellanos representaron al país”, aseguró Delgado Piedra.
En cada espacio sobre la grama del Cerro Pelado se vivió una fiesta de color y alegría. Los cinco combinados deportivos con los que cuenta Jovellanos mostraron lo mejor de un municipio pródigo de historia y tradición, sede este año del agasajo por el Día de la Cultura Física y el Deporte.
La dinastía Sánchez, perpetuada en el tiempo
Integrante de una de las familias más encumbradas en el béisbol cubano, Arturo Sánchez todavía recuerda su paso por los diamantes de pelota. En una de las paredes del estadio municipal de Jovellanos, Arturo develó una tarja que a partir de hoy perpetúa el paso de los Sánchez y su impronta por el pasatiempo nacional.
Allí rememoró, junto a otras glorias del deporte jovellanense, algunos pasajes del trayecto en la Serie Nacional. Miembro de equipos nacionales en las décadas de 1970 y 1980, inscribió su nombre junto a Armando, Wilfredo, Felipe, Fernando y Ariel, partes de una dinastía que los ha encumbrado en la rica historia del deporte cubano.
(Por: Carlos Manuel Bernal López)