Crear espacios para cultivar y potenciar el vínculo de los niños con la naturaleza y la protección del medio ambiente es la iniciativa que promueve el proyecto Vivero Verde Vida, en la escuela primaria República de México de esta ciudad.
«Con base en la permacultura como el arte de diseñar ámbitos de vida, la idea surgió luego de que quedaran cementadas todas las áreas tras el mantenimiento constructivo que recibió el centro desde hace dos años», explicó Ismaray Molina Santos, logopeda y líder de la propuesta.
Mediante el aprovechamiento de pomos plásticos, latas y gomas de vehículos en desuso, los pequeños con el apoyo de las familias y la comunidad se vinculan a la siembra de plantas para con el trabajo en equipo fomentar el cuidado e intercambio amigable y sostenible con la tierra.
«El proyecto dirigido en un inicio a los niños de tercer grado, aunque protagonistas de la tarea de cultivar, en la actualidad suma alumnos de otros años escolares a la acciones diarias con la atención y riego de estos espacios verdes», comentó.
Con ejemplares de plantas aromáticas, medicinales como el tilo y la manzanilla, ornamentales y algunas de ciclo corto como la lechuga y el tomate para contribuir a la alimentación en el propio centro –aseguró- los propósitos consisten en crecer e incorporar experiencias de otros proyectos como los desarrollados en el Callejón de las Tradiciones para ampliar la actividad.
Sofía Nodarse Hernández, pequeña integrante de la iniciativa, afirmó disfrutar de la labor que realizan en el vivero, principalmente con el cultivo de la sábila, su variedad favorita, así como la decoración de las macetas y las visitas a patios de la comunidad en búsqueda de tierra.
«Estar en armonía con el medio ambiente resulta una necesidad para el ser humano porque dependemos de él, este proyecto no solo promueve la agricultura y el amor por la naturaleza sino que también estimula la laboriosidad y la creatividad como valores en los niños», resaltó Molina Santos.