Este domingo cumplió cinco años “Travesía Mágica”, taller infantil dirigido desde su inicio por los actores Mariam Costa y Pedro Rubí. El espacio, concebido como plataforma de acercamiento al teatro en edades tempranas, ha formado desde entonces a decenas de infantes, potenciando su sensibilidad artística y fomentando la vocación por el arte de las tablas.
Cada martes y miércoles, el Patio Colonial de la Asociación Hermanos Saíz (AHS) en Matanzas acoge este espacio entre juegos y derroche de creatividad. Quienes transitan en ese horario por el Callejón de la Sacristía, en la urbe yumurina, no pueden evitar volver la mirada hacia los pequeños y sus risas en medio del taller.
Para Mariam, “Travesía Mágica” es asidero de sueños y renovación constante entre contextos complejos. “Esos pequeños son capaces de crear una burbuja donde nada ni nadie existe, solo nosotros”, confiesa. Con ella, una de sus artífices fundamentales, conversamos desde el Periódico Girón acerca del decursar de este proyecto, su impacto y las proyecciones más inmediatas.
— ¿Cómo surge Travesía Mágica?
— Travesía Mágica nació de un bichito que ya traía del grupo anterior donde me formé. Cuando llegué a Matanzas quise continuar con ese trabajo que amo y respeto, y entonces decidí abrir la convocatoria. En ese momento en la ciudad solo existía el taller “Reparadores de sueños” y me pareció una buena oportunidad para fomentar el arte teatral con los niños y niñas matanceros.
“El número reunido casi siempre oscila entre diez y quince, pienso que es mejor para el formato del taller y también porque quiero que todos brillen y trabajen a la par. Pienso que es una característica nuestra, ese trabajo constante pero parejo de todos en cada espectáculo”.
— ¿Cuáles crees que han sido los resultados más importantes hasta el momento?
— El acercar el arte a los niños y ver cómo evolucionan, es sin dudas el premio mayor.
“La estructura del taller, el formato de trabajo durante todo el año con un espectáculo final que funciona como cierre, nos permite acompañar ese tránsito de acercamiento y sin dudas es muy gratificante. A pesar del tiempo de pandemia en que las sesiones se suspendieron, hicimos dos espectáculos con los cuales nos sentimos muy satisfechos, por la acogida y el resultado final que logramos.
“La peña “Mágicos y traviesos” también nos ha regalado muchas alegrías. Surge como una manera de ofrecer mayor visibilidad a los niños del taller, mucho más sistemática. Es un espacio fijo que realizamos una vez al mes en la sede de la AHS y que pretendemos sostener.
“Si tuviera que definirlo con cinco palabras, serían: locura, estrés, magia, sonrisas y arcoiris. Te resumo desde el proceso hasta el resultado”.
— ¿Cuáles son las proyecciones más inmediatas de “Travesía Mágica”?
— En primer lugar, continuar con las sesiones cada martes y miércoles, después de meses de distanciamiento por el tema covid. En estos momentos también nos ocupa el montaje de nuestro tercer espectáculo, “La cucarachita Martina y el ratón Pérez”.
“Seguir trabajando y fomentando esta vocación en los más pequeños. Ese es nuestro motor impulsor”.
