A pocos días de comenzar, la Liga Élite ya tiene desafíos más allá del béisbol y sus diferentes facetas competitivas, y es que el huracán Ian se ensañó con los estadios de Artemisa y Pinar del Río.
Varias torres del alumbrado artificial sufrieron los embates del viento de más de 200 kilómetros por hora y la pizarra digital de la sede de Tabacaleros sufrió daños colaterales por la caída de una de dichas estructuras. En las fotos compartidas en redes sociales se pueden observar daños considerables en el estadio Capitán San Luis y el 26 de Julio.
En la fase recuperativa se tendrán que establecer las estrategias necesarias para rescatar sobre todo el terreno sede de los vueltabajeros, pues en este estadio se preparan los integrantes del conjunto Tabacaleros que formarán parte de esta competencia.
No obstante, ya se han determinado algunas fechas, como la del congresillo técnico, a realizarse el 5 de octubre, y el 8 la apertura del torneo con el enfrentamiento entre los equipos Agricultores y Tabacaleros, en el estadio Mártires de Barbados de Bayamo.
El día 11 Centrales recibirá a Portuarios en el Victoria de Girón, sede por estos días de un intenso entrenamiento que incluye ajustes de varios atletas que disfrutaban de un descanso.
El área de picheo es una de las fortalezas de este conjunto que integran destacados peloteros de Matanzas, Villa Clara y Cienfuegos. Jesús Salgado, responsable de los lanzadores, ofreció algunos detalles de lo que han previsto para este corto período de preparación.
“Realizamos un diseño de acuerdo con el tiempo del que disponíamos, que todos saben que no es muy extenso. Sin embargo, cuando hicimos el diagnóstico de los lanzadores, comprobamos que se habían mantenido en forma desde sus casas».
“Lo que estamos haciendo es un entrenamiento dirigido, donde las partes técnica, física y demás están conjugadas en un mismo ejercicio, e intentamos acercar las prácticas lo más posible a la realidad, al juego de béisbol».
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“Tratamos que la estrategia no tenga ni altos volúmenes ni un gran rigor en cuanto a intensidad, que sea un entrenamiento para ir elevando el nivel de los atletas en la competencia. Quizás al principio notarán que los abridores estarán entre los 70 y 80 lanzamientos, trabajando así cuatro o cinco entradas, algunos podrán llegar a las seis, pero no más, para ir adquiriendo la mejor forma”.
El mentor Armando Ferrer afirmó que todos los atletas confirmaron su participación en este torneo, con excepción de Jefferson Delgado, quien salió del país en fecha reciente.
Los lanzadores matanceros Noervys Entenza y Yamichel Pérez están insertados desde el comienzo de la preparación, y enfocados en cada uno de los elementos que requieren para un mejor rendimiento.
«En cuanto a la ofensiva, el entrenador de bateo, el villaclareño Oscar Machado, aseguró que “los muchachos están enfrascados en todo lo que deben hacer para alcanzar la forma óptima y mantienen una cohesión excelente, lo que ayuda a tener un ambiente armónico dentro del equipo”.
Pocos días restan para que se dé la voz de play ball, y todavía hay algunas cuestiones por aclarar como el salario de los peloteros, que no debe ser igual al de la Serie Nacional, eso si respondemos a la lógica. Ya no se trata de cuidar el espectáculo, sino de crearlo, con los pocos recursos que existen y apoyados en otras entidades, desafío que hasta hoy la hermana menor de esta Liga, la Serie Nacional, no ha logrado.
Despejar las dudas y apartar las sombras en cuanto a nómina y calendario sería el primer paso para ir sumando el interés de la población, de por sí ya reticente a poner mayor atención a la competencia que pretende elegir los mejores con vistas al Clásico Mundial de Béisbol.
