Entre cuentos y canciones dos pequeñas se graduaron de la Bebeteca en la Biblioteca Pública “Ramón Guiteras” ubicada en el Parque de la Libertad, gracias a una de las iniciativas educativas creada, que funciona desde hace más de diez años a nivel nacional.
Durante la jornada, Luna, de tres años, y OdaLynda, de cuatro, disfrutaron junto a sus madres de las historias de la payasita Maravilla, interpretada por la magistral actriz Fara Madrigal, quien con el cuento de Ricitos de oros y los tres osos interactuaba con las pequeñas enseñándoles el arte de contar.
Para las madres de estas niñas, este tipo de actividad es óptima debido a que son infantes que permanecen en sus casas. Afirman que en la biblioteca están en contacto con los libros y realizan tareas que ni ellas mismas pueden hacer desde el hogar, además, de mantenerlas alejadas del teléfono.
Asimismo, agradecen la sistematicidad, pues a pesar de que es una sola frecuencia a la semana son muy pocas las veces en las que se ha cancelado una de las citas, pues solo el clima o la situación energética han propiciado que no se realicen estos encuentros.
“El objetivo principal de la Bebeteca es preparar a esos niños que no van a los círculos infantiles, enseñándoles las mismas actividades que realizarían en un círculo como los colores, las figuras geométricas y las posiciones» así declaró Ileana Hernández Martínez, trabajadora de la biblioteca y encargada de las actividades de la Bebeteca.
“También hacemos actividades para mejorar el control muscular e incentivar lectura, pero sobre todo la socialización con otros niños”, expresó la bibliotecaria.
Para Hernández Martínez una de las actividades más importantes consiste cuando termina el encuentro conversar con los padres para brindarles consejos para mejorar el aprendizaje de los niños, entre ellos jugar y hablar con los pequeños, e inculcarles la lectura desde edades tempranas pues con ella pueden mejorar la imaginación, la creatividad, la ortografía y su vocabulario.
Por ello, la Bebeteca más allá de ser un entorno dedicado a los niños también se convierte en un espacio para orientar a los padres durante la crianza. Es así como Ileana y las trabajadoras de la biblioteca hacen énfasis en la importancia del papel de la familia, porque la casa constituye la primera escuela donde se enseñan los valores y el comportamiento.
Lea también
Biblioteca versus Internet: una cruzada moderna
Las bibliotecas cubanas, otrora templos del saber con colas inmensas para consultar sus novedades, hoy acumulan polvo en sus estantes, algunos de ellos casi vacíos. Mientras, la mayoría de los jóvenes vive… Read more »
