La prevención, diagnóstico y tratamiento oportuno de la diabetes mellitus resulta una de las prioridades del sistema de salud pública en Cuba, con una prevalencia de 66,5 personas por cada mil habitantes, según cifras del Anuario Estadístico.
Este padecimiento es una enfermedad metabólica crónica, caracterizada por niveles elevados de glucosa en sangre, conocida en el argot popular como «azúcar en la sangre», que con el cursar del tiempo conduce a daños irreversibles en órganos como el corazón, vasos sanguíneos, riñones, ojos y nervios.
Vivian Diaz Guerrero, especialista de Prosalud, expresó a la ACN que condiciones como la alimentación poco saludable basada en la ingesta de alta cantidad de carbohidratos, grasas y azúcares; la falta de actividad física, el sobrepeso y la obesidad, asociadas también al consumo de tabaco y el alcoholismo, aumentan el riesgo de padecer diabetes.
Los síntomas de alerta como incremento de la sed, aumento del apetito, pérdida de peso, cansancio inexplicable, aumento de la frecuencia al orinar, piel seca, visión borrosa o lesiones en la piel que no cicatrizan, deben ser tomados en cuenta y acudir al médico de inmediato para un diagnóstico temprano, explicó.
Recomendó a las personas monitorear regularmente los niveles de glucosa,de colesterol y lípidos, disminuir el consumo de azúcar, carbohidratos y grasas, evitar el sobrepeso y la obesidad y el consumo de alcohol y el tabaquismo y practicar ejercicios.
Algunos factores de riesgo de la diabetes como la edad y los antecedentes familiares, no pueden ser controlados , sin embargo, existen otros en los que sí se puede intervenir, a través de cambios de comportamiento y una vida saludable, apuntó Guerrero. Refirió que el sistema de sistema de salud se basa fundamentalmente en la prevención, promoción de salud y diagnóstico precoz de la enfermedad y sus complicaciones.
Ante la magnitud del problema se ha hecho un llamado a tomar medidas en lo que se ha denominado » la epidemia silenciosa de obesidad», y se enfatiza en la búsqueda activa de personas con factores de riesgo, agregó.
Otro aspecto importante resulta la educación terapéutica a los pacientes con respecto a su enfermedad para lograr la comprensión de la enfermedad crónica y el compromiso del paciente para obtener una calidad de vida satisfactoria, precisó la fuente.
Según la clasificación de la Organización Mundial de la Salud, esta enfermedad se clasifica en: Diabetes Tipo I, Diabetes Tipo II y Diabetes Gestacional.
En el mundo la Diabetes es padecida por aproximadamente 422 millones de personas, mientras que, en la región de las Américas, se estiman unos 62 millones de personas con dicha enfermedad.
Según la Organización Panamericana de la Salud, tanto el número de casos como la prevalencia de diabetes han aumentado constantemente en las últimas décadas.