La magia de una proyección en la semioscuridad y la necesidad de pausar para comentar lo que se aprecia es posible de concretar, mientras exista el interés común de cinéfilos agrupados. Bajo el nombre de El Ático y con el clásico Memorias del subdesarrollo como motivo, se inauguró hace escasos días en Cárdenas un fructífero espacio de cine-debate.
En el culto entorno de la biblioteca “Virgilio Piñera”, aledaña al Cine Teatro Cárdenas, tuvo lugar este intercambio, organizado por el proyecto Joven Arte.
Fomentar la sed por dicha manifestación artística, sobre todo en el público joven, constituye el principal objetivo de esta iniciativa que pretende también brindar conocimientos a posibles artistas en el futuro.
“Me emocionó mucho llevar a cabo esta tarea sugerida por JovenArte”, manifestó Reniel González, moderador de la cita y joven realizador audiovisual. “El cine es la unión de las artes, la manera más bella de plasmar sentimientos, y analizarlos y debatirlos es una experiencia grandiosa”.
“Yo considero que fue una buena idea. Necesitábamos desde hace tiempo un espacio como este, y espero que se siga manteniendo con constancia”, declaró Adrián González Hernández, uno de los integrantes del debate allí sostenido. (Por Alejandro Guillermo Matos Puentes y José Alejandro Gómez Morales)