Como víctimas del llamado síndrome de Stendhal, algunos somos capaces de sucumbir de conmoción ante la belleza del arte.
Sirviendo de puente entre el pasado y la actualidad, la Biblioteca Provincial Gener y Del Monte propició lo anterior en la mañana de hoy, desde la Atenas de Cuba, con «Una mirada al Olimpo».
Así se titula la más reciente exposición de Susana «Gío» Fernández Bencosme, la joven artista matancera especializada en la fotografía fine-art.
Con influencia de clásicos como Rubens y la temática de la mitología griega en un acercamiento conceptual a la contemporaneidad, la obra conjunta denota un inusual fulgor a la altura de la mirada del visitante.
Bajo la primacía de la estética, definitoria para hablar del fine-art, también late en el trabajo de Gío un genuino y poderoso discurso de empoderamiento físico y espiritual.
En recorrido exhaustivo por la exposición, y según nos comparte la artista apenas veinteañera, «tal vez vemos a Afrodita, pero es un ideal de belleza; y una Hera que es la importancia de la fidelidad; o Artemisa, el cuidado de la naturaleza»…
Integrada en su particular búsqueda de la polisemia de la imagen, esta creadora ha hecho de sí misma autorretratos y, de ellos, piezas tan llamativas como las referidas a dichas diosas.
Una de las más notables muestras de su sello personal se da en el tríptico «Entre plumas y destinos», referente al mito de Leda y el cisne, donde el propio espectador puede conformar una interpretación narrativa a partir de lo que ve.
A su vez el «Apolo», concebido para apelar a un sugerente paradigma de belleza masculina, requirió enteramente el uso de inteligencia artificial para ser materializado.
Afirma Gío que la gestación de este proyecto se remonta al año 2021, dada la complejidad de su realización.
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