Este domingo, en las márgenes del río San Juan, todas las manos allí presentes eran movidas por un denominador común: amor y deseos de hacer por el bien de los demás.
Esta zona es objeto de una intervención social comunitaria en aras de mejorar las viviendas de familias en condiciones de vulnerabilidad, entre las que se incluyen las madres con tres o más hijos. También se mejora la infraestructura del área.