Hay hombres a los que no los vence el tiempo, ni siquiera la muerte con su cruel manto negro. Hay hombres que traspasan épocas, siglos y se convierten en suerte de faro para los que les suceden.
Cada enero Martí renace en su Cuba: la que con sus palabras como evangelio asaltó el Moncada, conquistó la Sierra y el llano, la que aún le lee y que cada 27 le ilumina hasta la eternidad.
Con antorchas en mano, como lo hiciese por primera vez aquel grupo de jóvenes justo en el centenario del natalicio del Apóstol, los matanceros desfilaron este sábado en homenaje a quien tanto quiso y defendió a su Patria.
Desde el René Fraga hasta la Plaza de la Vigía marcharon los yumurinos, encabezados por las principales autoridades del Partido y del Gobierno en la provincia.
«Que lo escuche el imperialismo, ¿dónde está Martí? ¡Aquí!», proclaman los matanceros en su andar por la céntrica calle Milanés.
Presidido por las autoridades matanceras, encabezadas por Susely Morfa, primera secretaria del Partido en Matanzas, y el gobernador de la provincia, Mario Sabines Lorenzo, se realizó un emotivo acto para homenajear al Apóstol en el 171 aniversario de su nacimiento.
(Noticia en desarrollo)