Aunque es matancero de nacimiento, Carlos Benítez siente que también es de Jovellanos, municipio en el que residió durante una parte importante de su infancia. Pero la Ciudad de los Puentes lo acogió de nuevo y, antes de culminar el duodécimo grado, le regalaría la oportunidad de lograr su sueño de convertirse en locutor.
“En el programa de facilitación social Frecuencia abierta se realiza una convocatoria para trabajar como locutor en la emisora provincial. Mi mamá me alentó a presentarme, conocía de mi afición desde niño por esta profesión, pero en ese momento exigían el título de bachiller. Finalmente no me presenté. Pero el destino realmente te coloca en el lugar que te corresponde, y al poco tiempo vuelven a solicitar locutores. En esa oportunidad sí aparecí en la prueba, porque, en definitiva, ¿qué tenía que perder?
“Con la condición de que debía terminar el 12 grado me aprobaron, con algunas recomendaciones. Así comenzó, en 1992, mi historia en los medios de comunicación en Matanzas”.
RADIO 26: LA DE TU CORAZÓN
“Las primeras oportunidades llegaron con los programas juveniles y para adolescentes, específicamente con En un dos por tres, que lo realicé en medio de los estudios y del Servicio Militar. Luego comencé en Órbita, informativo en el horario de la mañana, además de Pida usted y Tiempo A. Compartí cabina con Isis Martínez en el programa En la radio, aunque he participado esporádicamente en casi todos los de la emisora por necesidades de la planta matriz de cubrir ciertos espacios.
“La radio es ese lugar donde siempre deseé trabajar, porque desde pequeño me apasionaba ese mundo. Tuve el placer de conocer a todos mis ídolos y comprendí que la vida de los radialistas era inmensa, rica, con desafíos inimaginables.
“Durante estos 30 años frente a los micrófonos he tenido experiencias que me marcarán por el resto de la vida, como conocer a Lucius Walker, líder de la Caravana Pastores por la Paz, cuando realizó uno de sus viajes a Cuba; a Mike Kennedy, cantante de Los Bravos, porque era una figura importante de la década prodigiosa, una música que se escuchaba mucho en casa; al cantante español Dyango, al que tuve la oportunidad de entrevistar; y a figuras importantes del mundo de la política en eventos en los que he participado”.
TV YUMURÍ: SU IMAGEN MÁS CERCANA
“En el telecentro comienzo justo cuando se funda, en un programa cultural que se llamaba Cuando llegan las musas, junto a la estelar Migdalia Morales. Aunque muchos puedan pensar que la locución es la misma, no es así. Enfrentarte a las cámaras, a pesar de tener conocimiento de cómo se realiza en la radio y de la preparación teórica que puedas tener, es todo un reto.
“No puedo decidir por uno u otro. Cada uno me cautiva de manera diferente porque son dos mundos completamente distintos.
“En la radio los oyentes tienen que ‘verte’ a través de la palabra. En la televisión debes estar pendiente a cualquier gesto que pueda desviar la atención, al maquillaje, a la ropa, al rostro, porque no siempre estás feliz y eso no se le puede demostrar a la audiencia”.
SIMPLEMENTE CARLOS
“Con el público mantengo una postura de respeto y quizá por eso es que me he ganado el cariño de muchos. Esas muestras de amor las recibo con ilusión y hay historias hermosas para contar, pero me obliga al mismo tiempo a prepararme más, precisamente para complacerlos mejor. En ocasiones está el reconocimiento monetario, pero lo que realmente te llena es el afecto que tienen las personas que te ven en el telecentro matancero o que te escuchan en la emisora provincial, e incluso cuando te detienen para preguntar por qué ya no participas en un programa específico. Siempre dedico un tiempo a los que interrumpen mi camino para mostrar su afecto.
“Soy muy familiar, me encanta estar en casa, leer. También me gusta salir a divertirme y las fiestas, aunque no sé bailar. Tengo amigos tan intensos que son parte de mi familia. Detesto la mentira y el doble discurso. Soy leal y prefiero rodearme de personas que me aporten espiritualmente.
“A la vida solo le reprocho que no me regale más tiempo para aprender más, para prepararme”.
Gran persona aunque no lo conozco personal mente al escucharlo se siente que es sincero y honesto