El presidente cubano se refirió a la actual situación del país. Foto: Enrique González (Enro)/ Cubadebate.
El primer secretario del Partido Comunista de Cuba y presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez dialogó con los diputados sobre el complejo escenario económico del país y los retos y desafíos que plantean para la nación.
Temas que, dijo, fueron abordados con marcada prioridad en el VI Pleno del Comité Central del Partido Comunista de Cuba en el día de ayer.
El mandatario cubano recordó la brutal sacudida, que a nivel mundial, provocó la pandemia de la covid-19, la cual sacó a relucir las desigualdades y las fracturas que dan los sistemas neoliberales.
En medio de una epidemia a nivel global, dijo, “ los ricos se hicieron más ricos y los pobres se hicieron más pobres. Crecieron las desigualdades y en vez de ser un mundo más solidaridad, de mayor cooperación se convirtió en todo lo contrario, en un mundo lleno de conflictos, de incertidumbre y de recrudecimiento de los bloqueos”.
Recordó que el gobierno de los Estados Unidos aplicó las 240 medidas contra Cuba y el recrudecimiento del bloqueo.
A ello se sumó –apuntó el presidente– la inclusión de Cuba en una lista de los países que supuestamente apoya el terrorismo. “Hasta hoy nos mantienen en esa lista, lo cual te corta de inmediato todas las operaciones financieras a nivel internacional”.
Detalló que nos pusieron en esa lista utilizando fundamentalmente dos pretextos: ataques acústicos a funcionarios de la embajada norteamericana, cosa que fue desde el primer momento denunciada por Cuba y bien argumentada por nuestros científicos, incluso la comunidad de inteligencia de Estados Unidos reconoció que no se produjeron tales ataque.
Como segundo elemento, la permanencia de una delegación del ELN en Cuba, lo cual fue una solicitud del gobierno de Juan Manuel Santos cuando se iniciaron los procesos de diálogo de paz en Colombia.
Recordó que Cuba como garante del proceso se comprometía a garantizar la integridad de todas las partes que formaban parte del proceso.
“Resistimos todas esas presiones defendiendo nuestra posición como garantes en el proceso de diálogo. Sabíamos que íbamos a tener un costo, pero prevaleció la dignidad, la verdad y la capacidad para soportar presiones y provocación”.
“Todo esto es parte de un tercer elemento que es la enorme agresividad del gobierno de los Estados Unidos y que en estos momentos se manifiesta en todo”, dijo el mandatario al referirse a la enorme presión ideológica de campañas diseñadas mediáticamente para agudizar los efectos que en la economía han tenido factores como un bloqueo recrudecido, la escasez de medicamentos, alimentos y una compleja situación electroenergética compleja.
“El gobierno de los Estados Unidos ha hecho todos los intentos para provocar un estallido social que acabara con la obra de la Revolución”, sostuvo.
Señaló cómo en los momentos más complejos de la pandemia de covid-19 cuando era indispensable el control de la enfermedad, “nos negaron ventiladores pulmonares que hacían falta para nuestras salas generales y terapias intensivas; negaros oxígeno, hicieron presión para que una compañía no lo suministrara, en un momento además muy dramático”, dijo.
“Hicieron de todo pero enfrentamos la enfermedad con eficiencia y somos el segundo país que tiene más dos vacunas anticovid por habitantes, y estamos entre los primeros 15 países que tienen más de 90% de población vacunada con esquema completo. Fuimos los primeros que vacunamos a los niños superiores a dos años”, refirió Díaz-Canel.
Apuntó que se hicieron de manera coordinada múltiples acciones, con participación coordinada de la población, pero la agresividad fue tremenda. “Han provocado una situación económica social compleja y además de eso tenemos sobre nosotros ya los efectos complejos de la situación demográfica que vive el país: cada vez menos personas que forman parte de la población económicamente activa tienen que sostener más personas económicamente no activas”, dijo.
“Por lo tanto estamos llamados a un grupo de medidas que están en el Programa de atención a la Dinámica Demográfica”, señaló.
El mandatario cubano abordó la constante persecución financiera y el uso de presiones de todo tipo a numerosas empresas para que no realicen transacciones con Cuba, mediante “una campaña mediática de descrédito llena de odio, mentiras, engaño, calumnias…Mandaron un funcionario del Departamento de Estado por todos los países de América Latina y el Caribe para que no apoyaran a Cuba en la Cumbre las Américas”, dijo.
Asimismo, denunció el proceso de colonización cultural que fomentan, “una plataforma para lograr en nuestra gente que nuestro pueblo rompa con sus raíces, rompa con sus esencias, encuentre como obsoleto nuestra historia, para que entonces acoja los paradigmas culturales e ideológicos que el Imperio trata de imponer para dominar al mundo”.
Díaz-Canel puntualizó que Cuba está empeñada en un proceso de construcción socialista que se nutre de la historia de nuestro país, conjugando el reto de la alternativa necesaria y posible.
“Tenemos que ver qué es lo que podemos hacer dentro de esta difícil situación. Todo lo que hagamos tiene que tener un análisis muy riguroso desde el punto de vista de la construcción socialista, de qué riesgos hay que tomar en cuenta para que lo que hagamos en el presente no contradiga lo necesario en el futuro”, sostuvo.
El presidente afirmó que los propósitos en la condición socialista de Cuba, como lo definió Fidel, es el desarrollo y crecimiento económico pero con desarrollo social, que se defienda la soberanía, la independencia, que se logre la mayor justicia social posible.
Habló de la capacidad de resistencia, que destacó no se trata “ solo de resistir y aguantar y aguantar; se trata de en esas condiciones cómo resistimos y cómo creamos bases para avanzar”, y colocó como un ejemplo concreto de que ello es posible el diseño, desarrollo y producción de tres vacunas y dos candidatos vacunales propios para enfrentar la pandemia.
“Queremos la construcción socialista aspirando a la prosperidad. Nuestro pueblo merece prosperidad y no porque lo digamos nosotros; personas en el mundo entero reconocen la heroicidad del pueblo cubano y lo que merece el pueblo cubano, por lo que ha sido capaz de hacer en todos estos años, es prosperidad”, afirmó el mandatario quien consideró que a la prepotencia se impone la fuerza del ejemplo. “Quítame el bloqueo a ver que no sería capaz de hacer este pueblo”, sostuvo.
En este 2023 nos dimos la tarea de darle continuidad a los acuerdos del congreso del Partido Comunista de Cuba.
En medio de un contexto complejo-dijo- desarrollamos tres procesos ampliamente democráticos: El Código a la familias, las elecciones municipales del Poder Popular y las elecciones de los diputados para la constitución de la décima legislatura de la ANPP.
“En estos momentos, nosotros vamos a estar centrados en dos objetivos fundamentales, primero salir de la compleja situación que tenemos en lo económico y social y con un aseguramiento político integral. Esto exige desde el partido que se estimule la comprensión y la participación del pueblo. Lo segundo es el perfeccionamiento del funcionamiento de la Asamblea Nacional del Poder Popular y propiciar una gestión ágil y efectiva del gobierno, tanto en el nivel local como en lo alto en la nación”.
Agregó que se deben preparar y desarrollar una adecuada reserva de cuadros para que dentro de cinco años asuman responsabilidades más importantes, tanto del punto de vista del Partido como del Estado y del gobierno en nuestro país.
Otro concepto importante, indicó Díaz-Canel, es que los diputados representamos al pueblo y deben tomar muy en serio ese trabajo. “Hay que aprovechar todos los espacios que tenemos”.
El primer secretario del PCC señaló que Cuba aspira a un modelo económico y social que brinde prosperidad para la población y que abarque desde la alimentación hasta la recreación. Además que incluya el desarrollo científico, una riqueza espiritual superior y el bienestar.
Para lograr esto, “tenemos que tratar de hacerlo bien, es importante el buen funcionamiento de nuestras instituciones desde la base para llegar a las prioridades con sistematicidad”.
Indicó que en estos últimos tiempos se ha avanzado mediante el seguimiento de los Macro Programas con participación de equipos multidisciplinarios para seguir con el cumplimiento de los lineamientos del Plan Nacional de Desarrollo Económico- Social 2030 y los objetivos de desarrollo sostenible.
Aseveró que no podemos ser ingenuos ante las complejidades que se están viviendo y no dejar acumular problemas. “Hay que establecer un sistema que propicie el diálogo y el debate permanente”.
“Debemos cambiar todo lo que tiene que ser cambiado, pero sin renunciar a nuestro principios, sin apartarnos del concepto de Revolución”.
El presidente cubano puntualizó que existen cinco direcciones fundamentales de trabajo, estas son el desarrollo económico, la atención social y los problemas sociales, el fortalecimiento institucional, el trabajo con los cuadros y su fortalecimiento.
Sobre el desarrollo económico explicó que se trabaja en la recuperación de la economía con integralidad y articulación enfocado a la solución de los problemas. “Enseguida que salgamos de esta crisis económica- social que estamos viviendo, tenemos que hacer cambios más profundos en lo estructural para seguir avanzando en lo más estratégico”.
Foto: Enrique González (Enro)/ Cubadebate.
Recordó que en los dos últimos congresos del PCC se han aprobado varios documentos, entre ellos la conceptualización del modelo económico social y los lineamientos de la política económica social, así como el plan Nacional de desarrollo económico- social para 2030.
Agregó que se está desarrollando el programa estabilización Macroeconomica, el cual tiene entre sus retos el tema de la disponibilidad de divisas y los déficit fiscales. Ese programa -dijo- está diseñado por expertos, académicos, economistas que trabajan de manera permanente todas las semanas para implementar con urgencia todo lo diseñado.
“Una reforma fiscal, la recuperación del equilibrio monetario, la planificación y coordinación macroeconómica, el desarrollo de los mercados y las relaciones monetarias mercantiles, la entrada de divisas al país y también los elementos que tienen que ver con la dolarización y la competitividad”.
Otra prioridad es lograr bajar los precios y una mejor relación salario- precio. El mandatario cubano dijo que esto iría ordenando el resto de los indicadores económicos y sociales, así como impulsar la producción local de alimentos y su comercialización.
Agregó que hay que producir a nivel local los alimentos que necesita el país. “Sabemos que la principal fuente de alimento que le estamos dando a la población es la canasta y que no alcanza. Todo lo que entregamos está sostenido sobre la importación, con más de 2.200 millones de dólares que gastamos en este concepto, porque nos cuesta mucho generarlo”.
Díaz-Canel alertó que cada vez se pueden comprar menos, porque los precios de los fletes y de los alimentos.
“Hay que recuperar el papel de la empresa estatal agropecuaria en la producción de alimentos”. El mandatario dijo que los intermediarios, en muchas ocasiones, obtienen más ganancias que los propios productores, lo cual desestimula al eslabón más importante de la cadena.
En relación con las cadenas productivas y de comercialización de productos, Díaz Canel manifestó que hay que perfeccionar la contratación, el acopio y la comercialización por la vía Estatal. “Hay que aclarar también situaciones sobre el mercado ilegal en divisas”, dijo.
Explicó que hoy se está buscando incentivar la captación de remesas, criptomonedas y operaciones de cobro y pago en el exterior, y que se continúan buscando modelos conjuntos de producción cooperada entre el sector estatal y el sector no estatal.
Dijo que se identifican fuentes de financiamiento para la transformación de la agricultura, como contratos de producción cooperada para aprovechar capacidades de tierras ociosas.
En cuanto a las ventas en moneda libremente convertible, el presidente sostuvo que aún es necesario mantenerlas como una vía para captar la divisa que está dentro del país y para poder reinvertirlas y redistribuirlas en función de la economía.
Respecto a la inversión extranjera, dijo que hoy se trabaja en la eliminación de “determinadas manifestaciones de inmovilismo por parte de instituciones, no solo de comercio exterior, sino de un grupo de entidades que tienen actividades en esta área, que se demoran en dar respuesta. Los negocios son lentos, dejan a la gente esperando lo cual no estimula y no nos podemos dar ese lujo”.
En ese sentido, mencionó que se está perfeccionando la estructura de comercio exterior en el extranjero, las sucursales y las representaciones extranjeras en Cuba.
Asimismo, señaló que se adoptan medidas para fomentar y estabilizar el mercado cambiario y el financiamiento cerrado.
Otros desafíos en los que se trabaja— detalló Díaz-Canel— son el fomento de la producción nacional, las exportaciones, la defensa de la soberanía alimentaria y la educación nutricional, la transformación social en la atención a las personas en familias en situaciones de vulnerabilidad y la implementación de las estrategias de desarrollo territorial.
Valoró la importancia de tener en cuenta el análisis de todas las propuestas que salgan de los trabajadores, de los militantes para enfrentar entre todos los problemas que hoy tiene la economía nacional.
¿Dónde están las luces?, reflexionó el primer secretario del PCC. “Hay desequilibrio económico, pero tenemos un programa de estabilización macroeconómica que no resuelve esos desequilibrios de hoy para mañana, pero que puede ir atenuándolos a partir de acuerdos que hemos ido concretando”, sostuvo.
Reiteró que una prioridad es la reducción de los precios e insistió en que la producción local de alimentos es fundamental para eso.
El mandatario refirió que resulta contradictorio que se hayan incrementado algunas manifestaciones de delitos y, sin embargo, en algunos territorios disminuyan los expedientes de casos que se presentan a los tribunales. “Hay que seguir insistiendo en el diseño efectivo de un sistema de enfrentamiento, en los procesos ordinarios, en la planificación y sistematicidad de la actuación y sobre todo en el análisis comunitario”, enfatizó.
Como una dirección de trabajo esencial identificada, el mandatario se refirió al fortalecimiento institucional, aspecto en el que destacó la importancia de fortalecer la labor del Partido.
“Debemos lograr que el núcleo sea el espacio que se distinga por el análisis profundo, crítico, inteligente, comprometido y aportador, que proyecte soluciones, convoque a los trabajadores y los revolucionarios, que preste atención a todos los asuntos de justicia desde el ejemplo de la militancia, de la confianza en la transformación, el perfeccionamiento y la credibilidad”, consideró.
Reiteró el llamado a los diputados a estar más presentes en la en la base. “Las rendiciones de cuenta de los diputados tienen que tener otras dimensiones, para que sean más transparentes”, acotó el mandatario quien insistió en que las administraciones, en esas rendiciones, deben transparentar los presupuestos y su ejecución.
Foto: Enrique González (Enro)/ Cubadebate.
“La gente tiene derecho de saber en qué se emplean los presupuestos”, puntualizó.
“Hay que lograr el control popular con los grupos de trabajo comunitario integral y con la respuesta de las administraciones a los delegados de base. La Asamblea tiene que centrarse en discutir los temas que son parte de la agenda popular y seguir desarrollando el ejercicio legislativo”, comentó.
Para que esos proyectos de ley sean cada vez más robustos–insistió— se está haciendo un ejercicio más democrático de conocimiento y consulta de las leyes. “Casi todos los textos de las últimas leyes que se han presentado se han enriquecido y ese es uno de los resultados del proceso”, precisó.
Dijo que hay tres pilares definidos en la gestión de gobierno, entre los que destacó el proceso de transformación digital de la sociedad.
“Mañana vamos a discutir una ley que por primera vez en Cuba regula y sobre todo estimula la comunicación social del gobierno”, dijo.
Díaz-Canel destacó la importancia del fortalecimiento ideológico y las estrategias de comunicación social. “Nosotros necesitamos comunicar sin errores, dando bien los argumentos y desde una integralidad. Para eso es muy importante comunicar la verdad y la realidad de la Revolución”.
Al concluir su intervención el presidente cubano dijo que esta legislatura será histórica por todos los retos y los desafíos que tiene.