Este 2023 ocurrirán varios eventos astronómicos que sorprenderán a los observadores del cielo nocturno. Aquí les dejamos 11 que no pasarán por alto.
El 23 de enero, casi una hora después de la puesta del sol, se podrá percibir el resplandor de la delgada luna creciente en el cielo del sudoeste. Venus y Saturno quedarán separados por aproximadamente el ancho de un dedo índice y podrán ser vistos con binoculares o telescopios de jardín. El primero, más brillante, eclipsará al segundo.
El 22 de febrero, apenas descienda el Sol, Venus se ubicará un poco más abajo, buscando protagonismo, por lo que desde las zonas más al sur de América del Sur podrán ver a Júpiter e incluso cómo la Luna se desplaza frente a él por un corto tiempo, fenómeno denominado ocultación lunar.
La noche del 1 de marzo, Venus y Júpiter se acercarán el uno al otro, tan cerca que ambos planetas podrán verse incluso con los telescopios más pequeños.
El 11 de abril, una hora después de la puesta del sol, se podrá ver el emparejamiento de Venus y el cúmulo estelar de las Pléyades. El planeta se observará fácil a simple vista como un objeto brillante similar a una estrella. Ese día, Mercurio alcanzará su punto más alto en el cielo. Con binoculares, se podrá superar el resplandor del atardecer y observar este pequeño punto débil.
El 20 de abril, desde una pequeña porción del hemisferio oriental se podrá ver un extraño eclipse solar híbrido. En algunas regiones será total, y en otras anular. Este fenómeno terminará en el Océano Pacífico a unos 3000 km al este de las islas de Hawai. Solo un pequeño número de personas podrá ver tanto el eclipse total como anular, pero el eclipse parcial del sol se verá en una región mucho más grande, en Indonesia, Australia y Papúa Nueva Guinea, así como varias otras áreas del Pacífico occidental.
Desde la noche del 22 de abril hasta la madrugada del 23 de abril, ocurrirá una lluvia de las líridas. La Luna creciente se pondrá temprano la noche anterior, y dejará el cielo lo suficientemente oscuro como para que los observadores puedan vislumbrar incluso las estrellas fugaces más débiles. Lejos de las luces de la ciudad, podrán verse hasta 20 estrellas fugaces por hora.
El 22 de mayo, apenas se ponga el sol, convergerán la Luna, Martes y Venus, tres de los astros vecinos más cercanos y brillantes. Los elementos de este trío reluciente se verán muy cerca en forma de arco en el cielo occidental. El 23 de mayo, podrás encontrar a una Luna creciente entre Venus y Marte. Con binoculares podrá verse que también se acercan a la Luna las brillantes estrellas Cástor y Pólux de la constelación de Géminis. Esto ocurrirá igual el 21 y 22 de junio.
En la noche del 2 de junio, Marte se ubicará frente al hermoso cúmulo estelar “El Pesebre”, una colección de alrededor de mil estrellas jóvenes a unos 600 años luz de la Tierra, que integran la constelación de Cáncer, el cangrejo.
El 12 y 13 de agosto será el momento clave de la lluvia de Las Perseidas, considerada una de las lluvias de meteoritos anuales más espectaculares, pues, producen hasta 60 estrellas fugaces por hora. Se recomienda no usar binoculares y telescopios para observar estos fuegos artificiales.
El 14 de octubre, los espectadores que se encuentren a lo largo de una línea angosta que cruza América podrán ver un eclipse de sol “anillo de fuego”. La zona en donde será visible va de Oregón, pasando por Nevada, Utah, Nuevo México y Texas antes de cruzar el Golfo de México, y luego sobre partes de América Central, y por Colombia y Brasil.
Una lluvia de las Gemínidas tendrá lugar el 13 y 14 de diciembre. Si bien no es tan famosa como la de las Perseidas, los astrónomos estiman que deberían verse hasta 120 meteoros por hora.