Farmacia Triolet o Botica Francesa, actualmente Museo Farmacéutico de Matanzas. Foto: Irene Pérez/ Cubadebate.
“De Matanzas: su cielo azul y su botica francesa…”
Eusebio Leal
Dos amigos decidieron abrir una botica que almacenara fórmulas, jarabes, tinturas, pomadas, elixires, ungüentos, píldoras. Eran apasionados de la farmacéutica en pleno siglo XIX. Se aventuraron e hicieron historia, probablemente sin saberlo, el primer día del año 1882.
Juan Fermín Figueroa y Ernesto Triolet se convirtieron en los fundadores de uno de los lugares más emblemáticos de Matanzas.
La Botica, convertida en museo tras la nacionalización que impulsó la Revolución cubana, es única de su tipo en el mundo. La que queda. Resguarda más de cinco millones de piezas y conserva muebles e inmuebles originales de la época.
Es preciso proteger al primer museo de la farmacéutica en Latinoamérica, por eso lleva el título de Monumento Nacional desde hace casi 15 años. Aquí convergen la tradición, la cultura y la ciencia.
La Botica Francesa fue fundada el 1 de enero de 1882, en la ciudad de Matanzas, por los doctores en Farmacia Juan Fermín Figueroa y Ernesto Triolet. Foto: Irene Pérez/ Cubadebate.
Es la única botica francesa que se conserva completa en el mundo. Foto: Irene Pérez/ Cubadebate.
Suman cientos los tipos de medicamentos que se elaboraron en la botica y que hoy se conservan en el Museo Farmacéutico. Foto: Irene Pérez/ Cubadebate.
Libros de asentamientos de recetas. Foto: Irene Pérez/ Cubadebate.
Durante sus años como droguería fueron preparadas más de 150 fórmulas, entre ellas, jarabes, tinturas, pomadas, esencias, elixires, ungüentos y píldoras. Foto: Irene Pérez/ Cubadebate.
Los medicamentos que son mostrados en la colección fueron elaborados en la botica. Foto: Irene Pérez/ Cubadebate.
Todas sus colecciones son originales y fueron adquiridas por los dueños para la botica. Foto: Irene Pérez/ Cubadebate.
Antigua máquina registradora. Foto: Irene Pérez/ Cubadebate.
El Museo Farmacéutico de Matanzas atesora numerosas herramientas, vasijas, probetas e instrumentos del laboratorio original. Foto: Irene Pérez/ Cubadebate.
Farol de la Guardia. Foto: Irene Pérez/ Cubadebate.