Exclamaciones de Yo soy Fidel y decenas de banderas cubanas en el aire antecedieron la entrada en la noche última de 66 jóvenes de la provincia de Matanzas al Parque de la Libertad, como parte de la reedición de la histórica llegada de la Caravana con los barbudos a este sitio, donde el pueblo escuchó al líder Fidel Castro en 1959.
Flavia de los Angeles Contreras Vegas, integrante de la nueva generación de caravanistas, declaró a la Agencia Cubana de Noticias que experimentó muchas emociones durante toda la jornada, en la cual tuvo la impresión de viajar junto a los más reconocidos héroes de la Revolución, Camilo, Che y Fidel.
Iba delante en el camión y tenía la sensación de viajar en el tiempo, creo que todos los cubanos de cualquier época debemos sentir en algún momento el peso de la historia para valorar en su justa medida lo que nos toca preservar en el presente, somos sin lugar a dudas continuidad, aseveró la joven que cumple con el Servicio Militar, futura estudiante de Periodismo.
Por su parte Yosiel Oliver Ortega, primer secretario de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) en la provincia de Matanzas, expresó públicamente que urge en la época actual tener memoria histórica y no olvidar de donde venimos para saber hacia donde vamos.
Los matanceros tenemos las herramientas para continuar y engrandecer la obra revolucionaria, para mantener vivo el legado de Martí y de Fidel y asumir el protagonismo con la fortaleza que nos caracteriza en la batalla por impulsar la economía, acuñó el líder de la UJC, quien tuvo palabras de denuncia para el genocidio de Israel contra el pueblo de Palestina.
Durante el acto presidido por Mario Sabines Lorenzo, primer secretario del Partido Comunista de Cuba (PCC) en Matanzas y Marieta Poey Zamora, gobernadora del territorio, se entregó el carné de la organización a nuevos miembros del PCC y la UJC respectivamente, y se reconocieron a caravanistas de la histórica gesta.
Archivos históricos refieren que el 7 de enero de 1959 Fidel se dirigió al pueblo de Matanzas desde uno de los balcones del Palacio de Gobierno, intervención ovacionada con frecuencia, y que se extendió hasta pasada la una de la madrugada.
Según artículo del historiador Arnaldo Jiménez, publicado en la revista Matanceros, durante el discurso el pueblo solicitó al Comandante en Jefe impedir la parcelación del estadio Palmar de Junco, sede del primer juego de beisbol en Cuba de forma oficial del cual existe referencia documental, pedido que tuvo respuesta cuando el Ejército Rebelde impidió la destrucción del lugar. (Texto por John Vila Acosta/ACN–Edición web: Miguel Márquez Díaz)
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