Primera Hidroeléctrica de Matanzas: alegoría entre lo efímero y lo eterno

Primera Hidroeléctrica de Matanzas: alegoría entre lo efímero y lo eterno. Fotos: Raúl Navarro
Primera Hidroeléctrica de Matanzas: alegoría entre lo efímero y lo eterno. Fotos: Raúl Navarro

Enclavada en un recóndito paraje de nuestra provincia, las ruinas de una antigua hidroeléctrica, construida entre el otoño de 1918 y enero de 1920, emergen como un monumento de la industrialización temprana en el país, y a la vez, como testimonio del avance implacable de la vegetación.

Dicha instalación, que en su apogeo brindó electricidad a 2200 clientes, permanece hoy bajo el follaje del lugar, de un verde espeso e intenso que, sin embargo, palidece durante cada atardecer y sumerge a los alrededores en una atmósfera de melancólica belleza.

Según información recopilada por el Grupo Guamacaro del Comité Espeleológico de Matanzas, las obras ejecutadas para el aprovechamiento hidráulico incluyeron una represa de hormigón de 120 metros de largo, que elevaba las aguas del río Cañas para derivarlas a un canal de 800 metros de longitud. El mismo conducía las aguas a las turbinas, aprovechando un desnivel de 34 pies. Las tres turbinas instaladas, del tipo de ruedas gemelas, cada una con una capacidad de 270 caballos de fuerza, estaban acopladas a alternadores de 200 kilowatts, proporcionando así una fuente confiable de energía a la comunidad.

No obstante, el funcionamiento de la hidroeléctrica se vio abruptamente interrumpido por un ciclón que azotó la región. Las torrenciales lluvias desviaron el curso del río y dejaron la planta obsoleta.

Los relatos de los habitantes más antiguos hablan de la furia desatada por una crecida que arrancó de cuajo las tres turbinas generadoras de la instalación, condenándola así, en el breve lapso que suelen durar las grandes tormentas, a su definitivo deterioro y abandono.

Lea más: Investigaciones en curso en la primera Hidroeléctrica de Matanzas

De cualquier forma, las imágenes que se publican hoy trascenderán como estandartes contra la desmemoria, haciéndonos ver que las estructuras pueden desmoronarse, pero la belleza y la fuerza de la naturaleza siempre perdurarán, tejiendo una nueva historia sobre los cimientos del pasado.

Más que imágenes, presentamos alegorías entre lo efímero y lo eterno, donde la naturaleza reclama su protagonismo en un sitio que alguna vez fue dominado por el hombre.

Canal creado por donde fluía el río hacia las turbinas

Escalera de entrada a la instalación

Vista general aérea del interior de la hidroeléctrica

Bases donde antiguamente estaban instalados los generadores

Vista desde el interior de edificación

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Sobre el autor: Raul Navarro González

8 Comments

  1. Tuve el placer de visitar el lugar con el grupo Guamacaro. Definitivamente hermoso e interesante. Muchos éxitos a todo el equipo de Guamacaro y a Judit su directora en este proyecto en el que tanto han trabajado.

  2. Mi sugerencia es que en este tipo de trabajo utilicen un mapa para mostrar la ubicación de planta, las casas que se beneficiaban, el cauce del río, etc.

  3. Interesante, solo conocía como una instalacion para la producción de energía eléctrica a principio del siglo pasado la planta de Míster Claufio, instalacion q produjo energía eléctrica por ka diferencia de temperatura entre la parte superior e inferior del mar
    ¿ esta instslacion fonde estaba enclsvada? En una ocasión oí un comentario de q en la xona de los molinos hubo una, es a esa q se refiere el material

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