¿Oportunismo o coyuntura?

Coyuntura es, al menos en Cuba, sinónimo de aumento de precios. Todavía la noticia no se había informado en los medios oficiales, pero los comentarios de esquina ya alertaban que se avecinaban tiempos difíciles.

Y cuando el río suena… casi siempre piedras trae, así que los previsores con “efectivo” comenzaron a pertrecharse de productos de primera necesidad como alimentos y aseo. Motivo suficiente para que muchos se afilaran los dientes y comenzaran a “ajustar” los nuevos precios.

Así, si el motorista subió 50 pesos al viaje porque el combustible escasea y “tiene que comprarlo por detrás del telón”  a alguien que parece traerlo de Dubai, pues el de la carne de cerdo también aumenta, y el de los frijoles, y el del boniato, y el albañil y el de la cafetería…

Cada quien propone el precio que mejor le acomoda, muchas veces ni siquiera avalado por una ficha de costo o por los gastos de comercialización, más bien por el simple hecho de poder obtener unos pesos más con igual trabajo o mercancía.

Y allá, al final de la lista, está el trabajador, y los pensionados, los ancianos. O sea, la mayoría del pueblo que sostiene o sostuvo en algún momento la economía y los servicios de este país. Quienes deben “apretarse el zapato” y hacer maravillas para sobrevivir un mes entero con un salario que cada día tiene menos poder adquisitivo.

Para nadie es un secreto que el ordenamiento monetario no tuvo los efectos deseados, que las estrategias para darle valor al precio cubano y eliminar la dualidad monetaria nunca llegaron a buen puerto. El dólar sustituyó al antiguo CUC, y hoy todo gira en torno a la moneda extranjera: desde lo que se comercializa en el mercado negro, hasta lo que se oferta en el estatal y en las mipymes.

La escasez de bienes y servicios ha provocado una inflación incontrolable a la que en casi dos años no se le ha podido poner freno, aun cuando se han aprobado medidas para aumentar la producción de alimentos, topar precios, estimular las pequeñas y medianas empresas privadas o la estatal.

El propio ministro de Economía y Planificación, Alejandro Gil, reconoció en la pasada sesión de la Asamblea Nacional del Poder Popular que la inflación interanual registra un 45,48 %, siendo los alimentos, las bebidas y el transporte donde se concentra más del 80 % del efecto inflacionario.

Apreciar con una mirada crítica el fenómeno nos permite darnos cuenta de que la inflación es el resultado de la disminución de los planes productivos, el déficit de oferta y el aumento de la demanda, de los altos precios del mercado internacional, pero también de actos asociados al desvío de recursos y la especulación. 

Factores que encarecen a diario el costo de la vida y cuyo impacto lo sienten con mayor peso los trabajadores y los sectores más vulnerables de la población.

Que el precio de una libra de frijoles, por ejemplo, pueda llegar a ser mayor que lo percibido en una jornada completa de trabajo, o que con el salario de un mes no puedas adquirir ni siquiera los tenis más baratos del mercado, es una cruda realidad a la que nos enfrentamos muchos matanceros hoy.

Si a ello añadimos la falta de sensibilidad con que algunos se toman la atribución de variar los precios cada vez que sopla el viento, entonces muy mal anda no solo nuestra economía, sino también nuestra sociedad.

Apretar la soga a los demás para respirar uno mismo no es la solución, y por ello también deben velar las autoridades, para que en tiempos de coyuntura no aparezcan los oportunistas.

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Sobre el autor: Jessica Acevedo Alfonso

2 Comments

  1. Excelente artículo de Jessica Acevedo y de igual forma el comentario de «Un Jubilado Pensionado».
    Sólo añadir que la ineficiencia e ineficacia de tal «Ordenamiento» nunca se ha reconocido ni juzgado como debe ser.
    Seguirán tomando medidas desacertadas? Parece no haber la capacidad de salir adelante considerando la realidad cubana que nos muestra una decadencia y un retroceso en cada aspecto que se mire.
    El bloqueo económico y financiero existe desde hace décadas incluso acompañado de otros males que ya no existen y si comparamos la forma en que Cuba salía adelante del Periodo Especial anterior a este, deja mucho que desear y solo el presagio de un mal porvenir.

  2. Muchas felicidades para tí, Jessica, por tener el valor de decir y plasmar en tu artículo un problema que todos sufrimos cada día pero que nadie denuncia como tú, muchos porque temen represalias, otros porque no quieren perder su zona de confort y la mayoría porque van tirando a como pueden, hasta ver si eso cambia.
    ¿ Te has dado cuenta que en Cuba todos nos hemos vuelto comerciantes ? Los que no fumamos vendemos los cigarros que recibimos por la cuota, los que no toman venden las pocas botellas de ron que ofertan las bodegas de vez en cuando, muchos han abierto de la noche a la mañana una venta de garage, otros buscan que ropa presentable ya no usan ó pueden prescindir de ellas y las ponen a la venta, ó se las dan a alguien para que las venda, en la puerta de cualquier casa puedes encontrar sobrecitos de sazones, refrescos en polvo, venta de café colado, y cualquier cantidad de otras cosas necesaria ( hasta papel sanitario ), para una población que no tiene nada y lo necesita todo.
    ¿ Y qué decir de los comestibles ? donde quiera te venden queso blanco, croquetas, embutidos, picadillo de fábrica envasados, aceite vegetal, filetes de claria y hasta carne de puerco !!!! todos a precios de otra galaxia…
    Y ni hablar de las placitas particulares, estatales, carretilleros y vendedores ambulantes de todo, menos sensibilidad, comprensión y corazón para con sus semejantes.
    Cuba se ha convertido en un país donde todo el mundo vende y donde muy pocos compran, sólo los que su poder adquisitivo supera los 4000 ó 5000 pesos mensuales y con muchas limitaciones, pero se olvidaron como bien dices de los pensionados, los jubilados y los trabajadores que perciben salarios menores de 3000 pesos, los que construímos y mantuvimos viva esta Revolución en los momentos más difíciles de estos 60 años, que después del Reordenamiento monetario y salarial, donde los principales cargos del país, gubernamentales y políticos, los organismos armados, los Combatientes de la Rev.Cubana y determinados sectores de interés nacional les fueron otorgados salarios muy por encima de la media nacional, fuimos olvidados y ahora se dice que si nos aumentan algo, entonces dentro de 3 meses suben los precios de nuevo a los productos. » Haz lo que yo digo y no lo que yo hago » , plenamente vigente !!!!!

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