Amor por los gatos

Camila nunca está sola. No le molesta la infinidad de pelos esparcidos en cada rincón de su casa, ni los saltos imprevistos hacia sus piernas, sobre los muebles, o encima de la cama. De lo que tenga para comer comparte con ellos. Todo lo que hace para que sus gatos sientan el calor de un hogar y de una familia es recompensado con una simple caricia.

Bagheera, su gata negra, llamada como la pantera de El libro de la selva, la acompaña desde hace más de un año. Caminaba por Narváez cuando la encontró, pequeñita e indefensa, y no se resistió a llevarla a casa. El Michi, con sus pelos negros y blancos, ni siquiera sabía comer solo. Ella lo recogió y lo cuidó por un tiempo hasta darla en adopción a unos amigos, quienes tras su salida del país se la regresaron.

Más de 20 gatos ha recogido Camila de las calles. Los atiende y luego los da en adopción. La galería de su móvil es testigo de la relación de complicidad que crea con ellos.

Camila Bringas Gómez es Licenciada en Derecho. En una ocasión, mientras estaba en proceso de mudanza, decidió llevarse su gata al trabajo para no dejarla sola en el nuevo alquiler por el temor de que se sintiera perdida o escapara de casa. Un muchacho la vio, la fotografió y le dedicó una publicación en Facebook que compartió un grupo de fotos de Matanzas, destacando la sensibilidad de esta joven que vive enamorada de los gatos.

En una Cuba donde hoy se lucha por el respeto a la Ley de Protección Animal, abundan quienes, como ella, adoptan a sus mascotas como el mejor de los amigos, o el miembro más consentido de la familia.

Lázaro Benavides es un hombre mayor que nunca supo vivir sin un gato. Hace cinco años comparte su vida con una felina a la que nunca quiso nombrar pero que resalta por su peculiar pelaje. Duerme junto a él. Afirma que lo enamora la fidelidad de su gatica, lo cual le ha demostrado que no es cierta la idea de que son animales traicioneros.

El 8 de agosto se celebra el Día Mundial de los gatos, fecha en que todos los amantes de los mismos aprovechan para sacarse una foto junto a su mascota y mostrarle a todos cuánta felicidad causa sentir entre las piernas la caricia de un amigo en busca de cariño. (Fotos: De la autora y cortesía de la fuente)

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Sobre el autor: Lisandra Verdecia

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