El primero de agosto se celebra el Día mundial de la alegría, pero no hablaremos de eso, es solo un punto de partida para referirnos a algunos aspectos interesantes de un mes al que siempre le damos un caluroso recibimiento debido a sus altas temperaturas.
Ocupante de la octava posición en el calendario gregoriano, y conformado por 31 días, debe su nombre al emperador romano Octavio Augusto, quien lo denominó entonces augustus (en latín).
La flor que prevalece es el gladiolo, porque es común encontrarla en los jardines; mientras la piedra preciosa es el Peridoto, una gema de color verde, conocida como la «esmeralda de los pobres».
Las personas nacidas en agosto se caracterizan por ser meticulosas, organizadas y persistentes. Su signo del zodíaco es Leo (nacidos entre el 23 de julio y 23 de agosto) y Virgo (nacidos entre el 24 de agosto al 22 de septiembre).
Se considera el mes de los gatos, ya que de acuerdo a estudios científicos las gatas presentan el ciclo denominado poliéstrico estacional, vinculado con la temperatura y la luminosidad que propician el celo.
En el periodo comprendido del 11 al 15 de agosto ocurre el fenómeno astrológico denominado «Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo», que consiste en una lluvia de meteoros de actividad alta, conocidas comúnmente como estrellas fugaces.
Para los cubanos, en particular, Agosto también nos trae otras sorpresas y fechas para festejar. El primero es el día dedicado a los transportistas, el 10 a los del sector hidráulico, el 13 el natalicio de nuestro Comandante en Jefe; el 22 el aniversario de la Uneac, un día después el de la Federación de Mujeres Cubanas y el 30 el de los azucareros.
Nos sobran motivos, pues, para recibir agosto con la alegría que caracteriza a los cubanos.