“La altura se respeta, pero si le tienes miedo no puedes desafiarla”, es la máxima que cada día aplica el joven Oldanier de Armas Rodríguez. Allá arriba suspendido en una cuerda se mueve a sus anchas. Sabe que el trabajo vertical requiere de mucha capacidad mental y confianza; sin embargo, los equipos certificados con los que labora le permiten realizar maniobras riesgosas y al mismo tiempo seguras.
El alpinista, de poco más de una década de experiencia, acumula en su aval complicadas obras como la pintura y reparación de los hoteles Habana Libre y Riviera, y de casi toda la infraestructura hotelera de Varadero, también de tanques de agua y la limpieza de cristales en alturas.
Él forma parte del equipo que integra la recién estrenada Extremos SRL, una mipyme de la construcción especializada en soluciones constructivas en ambientes verticales y que, según su eslogan, asume con responsabilidad riesgos extremos para prestar servicios donde otros no llegan.
Si bien sus socios Roberto Ruiz Delgado y José Antonio Dencas López comenzaron siendo competencia como trabajadores por cuenta propia (TCP), en la actualidad conforman una sinergia perfecta para satisfacer los más exigentes gustos en materia de calidad constructiva.
Antes de constituirse como mipyme el pasado febrero, Tony, como lo conocen en la empresa, era un TCP con experiencia en la preparación de fuerza de trabajo, rescate y salvamento, en el dominio de las técnicas de alpinismo y con conocimiento de la seguridad y salud en el trabajo, habilidades adquiridas en su preparación como bombero.
En tanto, Roberto, con más de 24 años de trabajo como cantinero en el turismo, se definía como un emprendedor en la pintura de inmuebles de pisos.
Ambos vieron la posibilidad de crecer en su principal mercado, Varadero, compuesto por hoteles altos, y crearon un equipo que satisficiera esas necesidades. Dispuestos a conquistar los tres ambientes: las alturas, las profundidades y las labores en el suelo, son distinguidos por el sistema de gestión integral de la calidad, orientado al cliente.
A DONDE OTROS NO LLEGAN
Mientras la brigada de Oldanier pinta o da mantenimiento a las paredes del hotel Puntarenas, bien cerca de allí, un grupo que no rebasa los 30 años de edad, observa y se adentra en oficios como la albañilería, el cual deberá dominar antes de ingresar en el curso de técnicas de acceso con cuerdas y posicionamiento para el trabajo en alturas, impartido por el Ministerio de la Construcción.
Si algo se toma bien en serio en Extremos es la preparación, la disciplina y el rigor en el trabajo. Aquí no hay margen a la espontaneidad, cualquiera no escala o se sumerge, sin antes estar capacitado y con todos los medios de protección bien puestos. Ha sido la primera mipyme del país en ser autorizada para ejercer el buceo, y se encuentra actualizando las disposiciones vigentes.
Comenta Yamelín Lozano Castellano, asesora jurídica de la mipyme Extremos: “En su formación, lo primero es acoplarse a la disciplina y el rigor para luego adiestrarse integralmente como alpinistas. Se les enseña albañilería, electricidad, soldadura, pintura; pues tratamos de resolver todo lo que encuentren en la altura”.
De ahí que en estos momentos Extremos dispongan de un capital humano titulado para el trabajo en obras de difícil acceso, con el empleo de equipos de alta seguridad certificados para la actividad, con experiencia probada durante más de una década en rehabilitación de edificaciones y obras sumergidas.
“Logramos que el personal y los equipos especializados de protección, de cuerdas y arneses, que han sido importados desde el primer mundo, estén certificados según el Ministerio de Trabajo y acorde con las regulaciones nuevas”, agrega Lozano Castellano.
Precisamente, es el empleo de las técnicas de acceso con cuerdas y posicionamiento para el trabajo en alturas uno de sus elementos distintivos. Entre sus ventajas está el ahorro de costos, acortamiento de los tiempos de ejecución, máxima calidad y limpieza.
A ello se suman otras actividades como la construcción de nuevas obras y edificaciones, montaje, desmontaje y demolición de estructuras, remodelación, reconstrucción y rehabilitación de edificaciones. También la reestructuración de esculturas, elementos arquitectónicos, decorativos y otros objetos existentes, la instalación y mantenimiento de sistemas eléctricos, de equipos de climatización y pararrayos, y la elaboración, instalación y comercialización de elementos de carpintería.
Entre los servicios específicos se encuentran el tratamiento de limpieza con chorros a presión, limpieza de cristales, cúpulas, tejados y canalones, trabajos de impermeabilización, saneamientos preventivos, sellados de grietas y fisuras en superficies, la rehabilitación y pinturas decorativas; además del mantenimiento, reparación y limpieza en partes de la obra viva de embarcaciones y fotografía e impresión de productos propios de la actividad comercial.
SE HACE CAMINO AL ANDAR
Para Ania Marín Márquez, especialista comercial de Extremos, una de las mejores experiencias que han tenido desde su constitución como empresa ha sido el haber participado en la Feria de Negocios el pasado mes de mayo. Si bien constituyó un riesgo financiero, recibieron buena aceptación, pues el darse a conocer les abrió algunos caminos y más del 80 % de las 15 previsiones de negocios actuales resultaron de esta iniciativa.
“Tratamos de hallar la forma de solucionar las necesidades absolutas del cliente y para ello nos encadenamos con otras mipymes, TCP y empresas estatales proveedoras de productos y servicios, que completen el resultado esperado”, explica Marín Márquez.
A la vez que señala que como empresa se les hace difícil desplegar todas sus potencialidades. “Por ejemplo, no podemos adquirir los materiales en moneda nacional, en la que la mayoría de las veces brindamos nuestros servicios, y estamos a disposición de que quienes nos contratan puedan asumir el material y nosotros solo poner la mano de obra.
“El financiamiento de las materias primas es un problema, porque mayormente los productos de la construcción son muy difíciles de adquirir en el mercado nacional. A la hora de dar una solución, al presentar los materiales para ejecutar la obra, casi todos son en MLC y nuestros clientes estatales tienen limitaciones en su presupuesto en esta moneda”, agrega.
Analiza Lozano Castellano que el sistema bancario tiene implementada una institución financiera no bancaria para el otorgamiento de créditos y microcréditos en MLC, que puedan ser recuperables en esa propia moneda. “Para ello establecen tres variantes: a través de la contratación con las empresas presentes en el puerto del Mariel, de la exportación de servicios y de la venta en las tiendas en MLC. Por lo tanto, las empresas que prestamos servicios nos quedamos un poco en desventaja; si bien tengo confianza en que, como todo lo nuevo, se corregirá.
“También hemos tenido que lidiar con que aún hay un papel preponderante de la empresa estatal sobre los actores económicos privados. Si ella da la negativa para participar en la licitación o tiene falta de recursos para acometer la obra, pues no nos contratan. Someten a la mipyme a un proceso de subcontratación, a un sistema que va más allá de poder acceder directamente al mercado y que encarece el producto final y sufre la economía nacional”.
Los diversos actores económicos surgen con la idea de ir a un mercado en igualdad de condiciones con la empresa estatal, y que se dé la competitividad como base de enfrentar la calidad y el desarrollo. Poner los ojos sobre eliminar los obstáculos que todavía frenan el desarrollo de estos emprendimientos ha de ser prioridad en tiempos en que la economía cubana necesita un impulso. (Fotos de la autora)