Aunque había escuchado sobre la necesidad de que los hombres se hicieran chequeos preventivos luego de cumplir los 50 años, no lo creyó pertinente en su caso; ni siquiera ante algunos signos que achacó a otros motivos.
Cuando optó por ir ya era demasiado tarde. Su próstata precisaba de una intervención quirúrgica. Entonces, comprendió cuánto tiempo había perdido y decidió controlar periódicamente su salud.
Su caso no es para nada aislado. La mayoría de los de su edad evitan ir a consulta y no es hasta el último momento, cuando aparecen fuertes síntomas y, hasta una grave enfermedad, que determinan hacerlo.
Aunque este comportamiento no es exclusivo de los cubanos, el cáncer de próstata constituye aquí la segunda causa de muerte en el sexo masculino y cada vez incrementa más su incidencia. Afecta con más frecuencia a mayores de 60 años y con antecedentes de esta enfermedad en familiares de primera línea como padres y hermanos.
Por tal motivo, el Sistema Nacional de Salud dispuso en la atención primaria, un reactivo para identificar el antígeno prostático específico (PSA) en aquellos hombres asintomáticos a partir de los 50 años, o para los que lo soliciten, con el propósito de realizar el diagnóstico temprano.
LA ENFERMEDAD
Se trata de un tumor maligno en la próstata, glándula pequeña ubicada justo debajo de la vejiga que, aun cuando puede aparecer antes, por lo general ocurre después de los 50 años y es considerado el segundo carcinoma más frecuente en ellos, solo superado por el de pulmón.
Cuando se diagnostica en etapas iniciales hay posibilidades de curación. De ahí la importancia de realizar una pesquisa temprana a quienes acuden a consulta médica con síntomas urológicos. No obstante, tales señales suelen presentarse de igual modo en otros procesos obstructivos urinarios, como la hiperplasia benigna de la próstata y la estrechez de la uretra.
Algunas de estas señales son disminución o interrupción del flujo de orina; micción frecuente, sobre todo por la noche; dificultades en la contención de la misma; y ya más alarmante la presencia de sangre.
Si bien la detección precoz coadyuva a la erradicación de la enfermedad, cuando no se trata a tiempo sigue su curso natural, partiendo de un pequeño grupo de células cancerosas que pueden crecer y convertirse en un verdadero tumor.
Sobre ello existe rechazo a la exploración física, lo cual atenta contra el dictamen prematuro. El tacto rectal, por ejemplo, continúa siendo un tabú para los representantes de este sexo.
Para el diagnóstico se indica a los pacientes el examen conocido como PSA (Antígeno Prostático Específico), que no es más que un análisis de sangre y se realiza aquí mismo en la provincia. Posee tres rangos: inferior a 4 se considera normal, entre 4 y 10 dudoso (entonces se indica especialmente el PSA Libre), y superior a 10 positivo en un 85 por ciento, por lo que queda entre un 10 y un 15% de posibilidades de ser falso positivo.
Los resultados se valoran de conjunto con el tacto rectal, la sintomatología y el ultrasonido.
A TIEMPO SE GANA TIEMPO
Fuentes consultadas en internet revelan que en las Américas, el cáncer de próstata es el más común en los varones, con unos 413 000 nuevos casos y 85 000 muertes cada año. Los países del Caribe, especialmente Barbados, Trinidad y Tobago y Jamaica tienen las tasas de cáncer de próstata más altas en la región. Se alude, asimismo, a varios factores de riesgo.
Entre los más importantes destaca la edad; mientras aumenta también lo hace la posibilidad del padecimiento. También se incluyen la obesidad, el tabaquismo y los antecedentes familiares.
Aunque en Cuba no se comporta así, estudios realizados al respecto evidencian que se presenta con mayor frecuencia en los afroamericanos que en los blancos. Los asiáticos, por su parte, son menos vulnerables, sin embargo, cuando emigran a otras regiones se incrementan las posibilidades, lo que presupone la influencia del medio ambiente y de los hábitos alimentarios.
Aun cuando en la Isla se realizan las intervenciones quirúrgicas por mínimo acceso, similares a las del primer mundo, y se han obtenido logros importantes derivados del estudio clínico con la vacuna terapéutica Heberprovac, las estadísticas apuntan una alta mortalidad por esta causa, debido a que la mayoría de los pacientes llegan a la consulta en un estado ya irreversible de la enfermedad.
Por tal razón y con el objetivo de sensibilizar a la sociedad e informar la importancia del diagnóstico precoz y de los recursos y posibilidades para su tratamiento, cada 11 de junio, la Isla se suma a la conmemoración por el día mundial de esta enfermedad. Los hombres mayores de 50 años deben realizarse las pruebas diagnósticas que permitan identificar la enfermedad en sus estadios iniciales para tratarla adecuadamente y curarla siempre que sea posible.
