El proyecto Costatenas desarrolla la investigación y gestión de zonas costeras como la bahía de Matanzas.
La valoración de los bienes y servicios de la bahía de Matanzas constituye una de las líneas de investigación que con mayor fuerza desarrolla el Observatorio Ambiental Costatenas, ubicado en la Universidad de Matanzas.
El líder de esta iniciativa Juan Alfredo Cabrera Hernández expresó que el enfoque ecosistémico y la valoración económica de bienes y servicios ecosistémicos son líneas de investigación bien definidas en el país y en consecuencia han iniciado, de conjunto con la institución docente, varias acciones.
Más de 35 investigaciones efectuadas por estudiantes de Economía, Sociología e Ingenierías Industrial, Civil, Mecánica y Química tributaron a estas pesquisas; que establecen el valor económico, escénico, cultural e identitario de la rada para los habitantes de la ciudad de Matanzas.
Investigaciones en la bahía de Matanzas: un esfuerzo conjunto
“Involucramos a profesores y estudiantes en los grupos de valoración económica y trabajamos en interacción con la sociedad, el Citma, las empresas y comunidades porque sabemos que la gestión ambiental efectiva depende de una participación activa y nos centramos en generar conocimientos, percepción y mayor participación en estos temas”.
Añade, además, que la bahía matancera no es solo un escenario de navegación y transportación, ni un grupo de playas importante para la recreación, sino que forma parte de la identidad del matancero.
La línea de sostenibilidad ambiental se ha fortalecido en los últimos años con el llamado a las universidades a hacer ciencia en este sentido. De esa forma el Observatorio Ambiental Costatenas exhibe resultados importantes en la gestión de otras zonas costeras de la costa norte de la provincia entre ellas Cárdenas, donde se ubica Varadero y Martí. También mantienen un trabajo sostenido en la Ciénaga de Zapata.
Matanzas tiene una zona costera privilegiada, por ello resulta imprescindible comprender que los ecosistemas además de cumplir una función de soporte ambiental y de regulación de la naturaleza también poseen un valor cultural.
Lea también: Cuba subterránea, catedral fantástica para el turismo
