En la mañana de hoy varios estudiantes del preuniversitario José Luis Dubrocq de la ciudad de Matanzas inhalaron un gas desconocido aún y comenzaron a sentir mareos, falta de aire y enrojecimiento.
Con inmediatez la escuela fue evacuada. El Preuniversitario cuenta con una matrícula de 926 estudiantes y 65 trabajadores, de ellos resultaron afectadas ocho estudiantes; los cuáles se encuentran estables y hospitalizados en el Hospital Pediátrico Provincial Eliseo Noel Caamaño.
En el centro se encuentra una comisión que investiga las causas de este suceso.
Edilberto Casanova Armenteros, director general de Educación en la provincia, precisó que el incidente se produjo cercano a las aulas de décimo grado y por precaución se decidió posponer el proceso docente educativo hasta el sábado, día de la semana en que el centro acoge otras actividades vinculadas a la docencia.
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— Periódico Girón (@PeriodicoGiron) January 24, 2025
En el Hospital Provincial Eliseo Noel Caamaño donde reciben atención médica los afectados se encuentran las principales autoridades de la provincia Mario Sabines Lorenzo, presidente del Consejo de Defensa Provincial y Marieta Poey Zamora, vicepresidenta de dicha instancia; quienes se interesan por la situación de los pacientes; los cuáles permanecen estables y sin peligro para la vida.
Hasta este momento hay 22 pacientes en el centro, de ellos 12 en la Sala de Respiratorio, 4 en Terapia Intermedia y 6 en Observación.
El Doctor Julio Ernesto Hernández Sánchez, director del Hospital Pediátrico Provincial Eliseo Noel Caamaño de Matanzas, actualiza del estado de los estudiantes del preuniversitario José Luis Dubrocq atendidos en la institución tras reportar síntomas por inhalación de un gas aún desconocido.
Testimonios ofrecidos a Girón
“No tiene ningún olor. En mi aula yo estaba sentada y me empezó a picar la garganta. Pero como yo soy alérgica y hay cambio de tiempo, pensé que era eso. Estaba en la puerta y una de mi aula que había acabado de pasar por ahí se puso blanca de momento y luego empezó a ponerse colorada. Le pregunté qué le pasaba, y me dijo que le quemaba y parecía que habían echado algo en el baño. Yo tenía que ir con la jefa de grupo a ver la metodóloga de Física para saber si se podía adelantar el turno, cuando bajamos tuvimos que pasar por cerca del baño, comenzamos con mucho ardor y sentimos lo mismo, como si nos estuviera quemando.”, refiere Mariam Quintas Arias, estudiante que se encuentra hospitalizada en la sala de Terapia Intermedia de la institución médica.
Lianeisy Claro Moya, doctora de dicha sala médica refiere que en la misma se encuentran 4 pacientes. “Son cuatro niñas entre 15 y 16 años. Están todas estables, conscientes, bien despiertas, sin dificultad respiratoria, con una saturación perfecta, y bien hidratadas. Llegaron en estas mismas condiciones, con los mismos síntomas: resequedad en la garganta, escozor, picazón en la garganta; algunos con fatiga, falta de aire y sensación de desmayo. Pero están estables clínicamente. Algunos que tienen antecedentes de asma llegaron con sibilancias de la auscultación. Se les puso su hidrocortisona y están con oxígeno”.
Por su parte, Yaima Rodríguez Lazo, especialista del servicio respiratorio explica que en su sala permanecen 12 pacientes. “Siete con oxigenación y cinco sin ella. Hasta ahora se encuentran asintomáticos, saturando bien, con buena apariencia. Al llegar al servicio lo que presentaron fue sensación de ahogo, dificultad respiratoria, dos solamente tenían estertores bronquiales. Los que mantenemos con oxigenación era porque se encontraban hiposaturando en ese momento, y que después de administrar oxigenación y esteroides por vía venosa mejoraron la sintomatología. Ahora los tenemos bien, en observación. Estamos haciendo el estudio, tomándole signos vitales cada una hora”.
Yisel Almeida Sánchez, mamá de Yailenys Rodríguez Almeida, comenta que nada más que supo lo sucedido acudió a la institución educativa. “Ella me llamó, me dijo que había aspirado eso y se puso nerviosa, me dijo que no podía respirar. Empezó con dolor en el pecho, se tuvo que tirar en el piso y las amiguitas enseguida la auxiliaron. Yo inmediatamente fui para allá con su papá. Cuando llegamos ya estaban las ambulancias y la policía haciendo su trabajo. Vinimos para el pediátrico donde la atención fue rapidísima. Enseguida le enjuagaron la boquita y la cara, le pusieron oxígeno, tomaron presión, todo constante. Ella empezó con dolor en el pecho, le inyectaron hidrocortisona. El personal muy pendiente”.
(Noticia en Desarrollo)
