Calzada de San Luis en el amanecer del 10 de septiembre del 2017, al paso del huracán Irma por Matanzas
El paso del huracán Irma por el territorio matancero en septiembre del 2017 fue una demostración de las proporciones que pueden alcanzar las fuerzas de la naturaleza.
La posición geográfica de Matanzas en la costa noroccidental de la isla de Cuba, frente el Estrecho de La Florida, la hace vulnerable ante el paso de los ciclones y tormentas tropicales que comúnmente, entre los meses de septiembre y octubre, transitan hacia el norte.
El huracán, uno de los más poderosos de los formados en la cuenca del Atlántico desde que se tiene registro, avanzó y dejó tras de sí una estela de desastre y desolación en algunas islas del Caribe. Irma y sus poderosos vientos de hasta 240 kilómetros por hora cruzaron casi por toda la costa norte de Cuba el 9 y el 10 de septiembre, con un saldo de 10 víctimas fatales y graves daños en viviendas, la agricultura y sectores claves de la economía.
Ante el paso cercano a suelo nacional de la tormenta tropical Debby, sirvan estas imágenes para recordar que cualquier medida siempre será poca en la prevención de los daños que traen consigo dichos fenómenos. (Por: Julio César García)