La ciencia tiene la misión de transformar las circunstancias que nos rodean para optimizar funciones, y el deporte no escapa de esa necesidad, por lo que la aplicación científico técnica es primordial en uno de los negocios más lucrativos del mundo moderno.
Varias son las estrategias que se desarrollan en la base para generar resultados sobresalientes en cada disciplina, y redirigir la preparación de acuerdo a las necesidades individuales de los atletas e, incluso, reorientarlos a otro deporte según las capacidades evaluadas.
En Cuba se realizan esfuerzos por llegar a las categorías menores con diversos estudios, pero no siempre la buenaventura acompaña a este tipo de proyectos. Por ello, muchos entrenadores, comisionados y otros profesionales impulsan acciones científicas en su radio de acción.
Yoan Michel Collado Quintero es uno de esos ejemplos, y así lo demuestran los resultados del voleibol escolar en la provincia de Matanzas. Acerca de su visión y retos para lograr poner la ciencia al servicio del futuro de la malla alta, conversó con el periódico Girón.
«La superación creo que es parte diaria de cada entrenador. Siempre hay algo que analizar, que planear, que mejorar, que evaluar y corregir. Quien no esté a tono hoy con las corrientes contemporáneas del entrenamiento deportivo, muy difícilmente tenga éxito y se establezca por años en la cima o el grupo de avanzada en los juegos escolares o juveniles.
«En cuanto al crecimiento personal, es primordial que te guste lo que haces y tener ansias de aprender, escuchar cuanto pueda aportar a tu trabajo y aplicarlo, sobre todo eso. Cuando acumulas esa cantidad de información que lees o ves por cualquier vía, después hay que saber aplicarla bajo los principios siempre del entrenamiento deportivo, los cuales no han cambiado mucho.
«Ahí comienza un largo proceso en el cual te unes muchísimo con los atletas y los componentes de la preparación para cada deporte, que te dan la forma de evaluación y control del rendimiento de los atletas y del conjunto en general.
«En los deportes colectivos creo que es un poco más fácil, porque cuando el grupo encumbra el trabajo deja de ser grupo y se convierte en equipo y es ahí cuando sabes que la aplicación de la ciencia en el proceso del entrenamiento deportivo está dando fruto y por ende llegan los resultados.
«Aplicar ciencia con un atleta en el proceso diario del entrenamiento, tanto dentro como fuera de la cancha, es eslabón fundamental para obtener resultados deportivos aceptables. La ciencia aplicada en edades tempranas para el desarrollo de los atletas creo que es la mayor satisfacción, no solo en los momentos de victoria, también cuando el resultado no sale, pues llega el proceso de análisis para saber en qué parte te equivocaste y aprender de ello para no volverlos a cometer.
«Los cimientos son el principio de la pirámide de alto rendimiento, es donde comienzan los niños, crear y aplicar estudios profundos a través de los foros de base y municipales nos permite extender aspectos que algunos entrenadores no conocen y son fundamentales en los inicios de esos futuros atletas».
Algunos exalumnos de Yoan Michel son exitosos voleibolistas en la actualidad.
«Más allá de eso, veo el éxito en el desarrollo integral de un atleta. Obviando el championismo que está implícito en cada entrenador. Es verdad que siempre se quiere ganar, pero si se va a la aplicación de la ciencia como tal, el desarrollo del atleta es lo más importante.
«Según las bases científicas, primero se aprende a entrenar, luego se entrena para aprender a jugar y luego se entrena para ganar, pero lo más importante es que el niño que se inicie como atleta de alto rendimiento tenga un desarrollo integral bajo un rigor científico».
