En una emotiva gala celebrada en el Teatro Sauto se evidenció la gran sensibilidad de quienes integran la Red Cubana de personas que viven con VIH, y que arribó a su cuarto de siglo con el amor y la comprensión como valores que les distingue.
Fueron muchos los amigos allí presentes que durante estos años han contribuido con su granito de arena para eliminar el estigma y la discriminación hacia las personas que padecen la enfermedad, y que gracias al trabajo de la red han logrado insuflarles esperanzas y ganas de vivir, más allá del padecimiento.
Así, se puso de manifiesto en la jornada, matizada por el recuerdo de los que ya no están, y el apoyo constante a esos que laboran desde el año 1996 en el acompañamiento a las personas que viven con VIH, así como a las familias y amigos.
Desde su creación, esta red, conocida hoy como RedCub+, asumió la misión de asistir, orientar y contribuir a la calidad de vida de los diagnosticados con el virus, así como capacitar a familiares, amigos y parejas.
Desde entonces ha surgido una especie de confraternidad, que no dudó en asistir al Teatro Sauto a pesar de las inclemencias del tiempo. Eran muchos los allí presentes, quienes contrajeron una especie de deuda de gratitud con una organización que se ha caracterizado por brindar amor.
Por el escenario desfilaron artistas de primera línea para agasajar a los homenajeados, como la pianista Elvira Santiago, la agrupación Atenas Brass Emsemble, el solista Yoandry Pons y el artista del transformismo Salomé Montiel, entre otros.
Pablo Omar Milián, con marcado liderazgo en la labor de esta red, agradeció a las instituciones y personas que han brindado su apoyo y contribución generosa a lo largo de estos años.