Un análisis profundo sobre el contexto internacional actual realizó el primer secretario del Comité Central del Partido y presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, durante una reciente entrevista con la televisora Russia Today.
En diálogo con la periodista Aliana Nieves Quesada, el jefe de Estado calificó de “excelentes las relaciones entre Cuba y Rusia, lo que responde a lazos históricos de amistad y hermandad forjados desde la época de la Unión Soviética”.
Calificó al presidente de Rusia, Vladímir Putin, “como un amigo sincero hacia Cuba, que además lo ha demostrado con hechos”, y agradeció a Moscú por su contribución humanitaria con alimentos y medicinas, así como por la cooperación mutua en varios sectores claves para nuestro desarrollo.
De amigos, pero también de “estratégica” en términos políticos calificó la relación bilateral, “basada en un sentimiento de respeto, de amistad, de coincidencia en temas políticos y también con una potencialidad de participación conjunta, mutua, con beneficio para ambas partes en las relaciones económico-comerciales y financieras, porque también hay proyectos que tienen que ver con las finanzas que se están desarrollando de manera conjunta”.
Condenó y rechazó en nombre de Cuba “la expansión de la OTAN hacia las fronteras con Rusia”, así como “todas las medidas y sanciones que se han aplicado como método de coerción contra la Federación de Rusia”.
En cuanto a las críticas sobre los lazos entre Rusia y Cuba, Díaz-Canel, como respuesta, comparó la actitud de “un vecino poderoso” que “nos bloquea y cada vez nos recrudece más su bloqueo, nos aprieta más las tuercas, y trata y sigue tratando de encantar con cantos de sirena”, con la de “amigos de otros lugares, de otras latitudes, que realmente sí nos apoyan con hechos concretos y en condiciones que no afectan nuestra soberanía”.
“Yo creo que también responde a que, como parte del conflicto europeo en el mundo, mediáticamente se ha construido una campaña difamatoria de la Federación de Rusia, de los valores del pueblo ruso”, agregó, sobre las críticas mencionadas por la reportera.
Sobre la vida de la Isla en los últimos días, destacó la importancia de la recién aprobada Ley de Comunicación Social, que describió como “histórica” y “moderna”.
El presidente destacó que la iniciativa legislativa se aprueba mientras Cuba, así como otros países, “es totalmente agredida mediáticamente por campañas de odio, por campañas de calumnias, por campañas de descrédito que están orquestadas y están orientadas desde centros de poder imperiales apoyados por el Gobierno de Estados Unidos, sobre la base de plataformas transnacionales”.
América está llamada a integrarse cada vez más
El jefe de Estado señaló que las relaciones mundiales ahora se basan en la política agresiva de EE.UU., que “constantemente levanta muros, aplica sanciones coercitivas, chantaje, agresión, calumnias.
“Por otra parte, en lo económico, esa política hegemónica se manifiesta en un control total de la economía mundial por parte del Gobierno de EE.UU., y por parte de organizaciones como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial. Y todo esto crea una enorme incertidumbre sobre la manera en que se pueden solucionar los problemas que agobian al mundo”, sostuvo, recalcando que “predomina un orden económico internacional totalmente injusto, antidemocrático”.
Específicamente, acerca de la región latinoamericana, agregó que está llamada a integrarse cada vez más, lo cual catalogó como “una deuda que tenemos todos los latinoamericanos”, y recordó los llamados de grandes próceres latinoamericanos como Bolívar, Martí, San Martín, O’Higgins y Benito Juárez a la integración latinoamericana y a una sola América.
Todavía nos faltan muchas cosas por hacer, y sobre todo por concretar proyectos y por concretar ideas y propósitos, agregó el presidente.
Durante la entrevista, recordó que “en la historia de América Latina siempre ha predominado (…) una enorme capacidad del Gobierno de Estados Unidos para adaptarse a las circunstancias, y siempre promover sus intereses y tratar de ganar para sus intereses en la realidad”.
“En los últimos tiempos, cada vez que sale un Gobierno democrático en representación del pueblo, que lo lideran líderes de la izquierda, que lo movían de la izquierda, que desarrollan programas de Gobierno que no se someten a los intereses de Estados Unidos, Estados Unidos hace todo lo posible por derrocarlos. Y en los últimos tiempos no ha utilizado los golpes, digamos, los golpes de Estado aquellos con agresiones y con intervenciones militares que conocemos de otra época, de los años 60, 70 y 80”, dijo.
Denunció que ahora Washington recurre a “los golpes suaves”, a la guerra no convencional, a “la judicialización de la política”, y utiliza “un ensañamiento y una persecución sobre la base de una construcción de mentiras, de calumnias, de falsos sucesos sobre esos líderes de la izquierda, sobre su familia, sobre sus amigos, sobre todo su entorno, que es de una manera brutal”.
Brics plantean oposición a los conceptos de la Guerra Fría
En ese contexto, Díaz-Canel exaltó el protagonismo de los Brics, bloque conformado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, que defiende la multipolaridad y el multilateralismo en las relaciones.
“Al defender el multilateralismo, los Brics están planteando una oposición a los conceptos de la Guerra Fría, están dando la posibilidad de un orden económico internacional más justo, más equitativo, que favorezca todo. Están propiciando que haya relaciones más cooperativas entre países en las relaciones económico-comerciales y, además de eso, con toda esa visión, están favoreciendo relaciones que hagan perdurar la paz y que garanticen la seguridad internacional”, puntualizó el mandatario, al tiempo que reconoció el papel importante del liderazgo de Rusia en lograr que el mundo avance hacia el multilateralismo.
Añadió que los Brics representan “una alternativa importante para la integración económico-comercial, sobre todo de los países con economía emergente, de los países más pobres, los países del llamado Tercer Mundo, los países del Sur”.
El jefe de Estado cubano opinó que, con estos planteamientos del Brics, se puede avanzar “poco a poco a la construcción de un orden económico internacional más justo, más cooperativo, más inclusivo, más democrático, y al final todo eso va a redundar también en más paz y más seguridad internacional y más posibilidades para todo”.
Cuba condena la injerencia en asuntos internos de China
Díaz-Canel alertó sobre la postura de EE.UU. con respecto a China, que considera “una gran preocupación para EE.UU., como lo es Rusia también por el papel relevante que están jugando a nivel internacional en la política, porque son potencias que defienden otro orden económico internacional, defienden el multilateralismo, defienden la paz, defienden el respeto entre las naciones y, por otra parte, por el desarrollo del potencial económico-financiero de China”.
Existen estrategias de aniquilación mediática hacia esos países, puntualizó el presidente cubano, quien profundizó en que se construyen maneras para difamar y desacreditar, uno de cuyos ejemplos es el tema de Taiwán.
Díaz-Canel recordó, a través de la televisora rusa en español, disponible en más de 1 100 redes vía satélite y de cable en todo el mundo, que el Gobierno chino fue reconocido por la Asamblea General de Naciones Unidas como el representante legítimo del pueblo chino.
Por esa razón, agregó, “todo esto que está sucediendo con relación a Taiwán es una injerencia en los asuntos internos de la República Popular China”.
“Cuba condena la injerencia en los asuntos internos de China”, dejó claro el jefe de Estado, al tiempo que añadió que también condena y ve con preocupación la presencia agresiva militar de Estados Unidos y sus aliados en el estrecho de Taiwán, tratando de crear un foco de conflicto en la región.
Una vez más expuso que el pueblo y el Gobierno de la Isla defienden, “de manera inalterable, coherente e irreversible, el derecho de China a su reunificación, y el derecho a defender el concepto de una sola China. Por lo tanto, todo lo demás que actúe contra eso lo consideramos una injerencia en los asuntos internos de China”, expresó.