El Banco de la Dramaturgia Cubana es un proyecto de la Casa de la Memoria Escénica, en colaboración con el Ollantay Center de Nueva York, que pretende recopilar, registrar, documentar obras y autores cubanos de todas las épocas. Incluso, como lo fundamenta mi colega, el también dramaturgo e investigador Pedro Monge Ranfuls, aunque haya escrito una obra de teatro, como puede ser el caso del Padre de la Patria Carlos Manuel de Céspedes o la poeta, editora y traductora Laura Ruiz Montes.
Es así como se registra en el futuro libro de Monge: “¿Quién es quién en la dramaturgia cubana?”.
El Banco, que se construye sobre textos, documentos, fotos, videos de obras y archivos de voces, es en realidad un proyecto monumental en defensa de la dramaturgia cubana, de la cual aspira tener la colección más significativa y completa.
Lea también: Develan nueva pieza dedicada al Chico, de Espino en el Museo de Esculturas de la Dramaturgia Cubana
Su visualidad parte del Museo de Esculturas en Madera de la Dramaturgia Cubana, con piezas del diseñador y escultor Adán Rodríguez Falcón, y se concreta en la escena con el Espacio Dramaturgia Vital, que cada dos meses rinde homenajes a autores cubanos, con la presentación de fragmentos de sus obras, como ha ocurrido hasta ahora con Amado del Pino o Abelardo Estorino, para ejemplificar.
Asimismo, el Banco defiende el patrimonio arquitectónico, histórico, ético y moral; propicia la relación de directores con autores o sus herederos, para posibles puestas; vela por las casas natales o tumbas donde yacen enterrados, de ahí la preocupación por la destrucción de la casa del autor de Morir del cuento, Abelardo Estorino, en Unión de Reyes; y exige que no se obvie al autor, como ocurre con afiches o textos promocionales, algo que se reitera en muchas agrupaciones cubanas.
Solo algunos de los objetivos del Banco han sido cumplidos en la ciudad de Matanzas, a través de la Casa de la Memoria Escénica como institución rectora. Se trata de un homenaje a los aportes de la provincia desde el siglo XIX a la dramaturgia cubana, con autores como José Jacinto Milanés, Federico Villoch, Virgilio Piñera, Dora Alonso, Abelardo Estorino, José Milián, José Ramón Brene, René Fernández Santana, entre otros.
Esta institución se encuentra solo en el comienzo, y constituye un privilegio para la dramaturgia cubana.
