Linieros de Matanzas apoyan en labores de recuperación en otros territorios.
Un contingente de trabajadores eléctricos, seleccionados de los municipios de Matanzas, participó en la recuperación de los daños causados por el huracán Ian al territorio capitalino de Boyeros, y desde horas tempranas del martes último se trasladó a Artemisa con el mismo objetivo.
Se trata de 57 trabajadores, entre linieros, choferes, operadores de grúas y especialistas en salud y protección, que se suman a otros 500 que llegaron a La Habana de siete provincias y tienen experiencias en las difíciles labores que presupone la recuperación de la infraestructura del sistema eléctrico después del paso de un fenómeno hidrometeorológico.
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Es una más de las batallas de los eléctricos cubanos que, movidos por la solidaridad, se desplazan a cualquiera de los territorios en apoyo a sus fuerzas o lo hacen en la suya propia; los que están en la capital proceden de Granma, Santiago de Cuba, Guantánamo, Las Tunas, Ciego de Ávila, Matanzas y Mayabeque.
George Batista, secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de Energía y Minas, destacó la actitud de los trabajadores del sector en todo el país, que están acostumbrados a grandes proezas, y manifestó su admiración por los que trabajaron en Boyeros, que se enfrentaron con postes derribados y partidos, crucetas desbaratadas y conductores muy dañados, en un municipio con extensas áreas rurales y gran arbolado.
La brigada de los matanceros (integrada por cuatro linieros y un chofer) se sumó a las fuerzas de la Organización Básica Eléctrica (OBE) de Boyeros y de la provincia habanera, formada por unos mil 200 efectivos, de ellos 695 linieros, indicó Batista Pérez, en conversación con la ACN.
Durante las jornadas en que los matanceros restañaron los daños en las líneas que llevan la energía eléctrica al Cacahual, el secretario del sindicatodirigente sindical intercambió con varios trabajadores, entre ellos algunos muy jóvenes que ya participaron antes en la titánica tarea de recuperar el desastre que provocó el incendio en la Base de Supertanqueros, en agosto último.
Alfredo Gallardo, el chofer operador de la grúa, perteneciente a la OBE de Jovellanos ponderó la destreza de los linieros, que muchas veces trabajan en condiciones de alto riesgo, con las líneas calientes y salen victoriosos.
Juan Gualberto Sotomayor Oña, al frente de la brigada de Matanzas, explicó que viajan sin medios de trabajo, en la mayoría de los casos emplean los de los propios territorios, y que siempre los acompaña un especialista en salud y seguridad del trabajo, quien verifica las condiciones y los equipos con que laboran, previendo siempre la integridad de cada uno de los hombres del colectivo.
Y Joan Arencibia, de 29 años de edad, secretario de la sección sindical de la OBE Atención al Turismo, de Varadero, aseguró que al concluir los trabajos en Boyeros siguen para Pinar del Río –con intermedio en Artemisa–. Y llevan en la mochila para una movilización sin fecha de retorno “los bienes personales, porque la solidaridad y el valor lo traemos en el corazón”.
(Por Ana Margarita González/ACN)
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